“Usurparon tus sueños”

Laguna /

No solo estamos incitados a perder nuestro tiempo consumiendo la basura audiovisual que nos presenta este Hollywood sumergido en una crisis de creatividad, también a través de las premisas y designios anodinos que la gran pantalla nos presenta, pretenden dictar que es lo que debemos de soñar y cuales son las metas que deberíamos de tener. 

Somos expuestos al cine y sus perversiones desde niños, donde a través de somníferos audiovisuales defenestran nuestro potencial y hacen de nuestros sueños propósitos vacíos y mundanos, apegados a estereotipos y placeres estéticos.

Žižek sostiene que el cine, al igual que otros medios de comunicación, puede ser utilizado para manipular y controlar nuestros deseos. 

Él argumenta que el cine es un medio que puede presentarnos una imagen idealizada de la realidad, que apela a nuestras fantasías inconscientes y nos dicta lo que deberíamos desear. 

En particular, Žižek se centra en cómo el cine puede ser utilizado para mantener y reforzar las estructuras sociales dominantes, el ideal romántico, las relaciones de poder y la jerarquía social. 

Además, Žižek critica la tendencia del cine de Hollywood a presentar una imagen idealizada del amor y el romanticismo, que apela a nuestras fantasías inconscientes de felicidad y satisfacción. 

Él argumenta que esta imagen idealizada del amor y la felicidad puede ser utilizada para controlar y manipular nuestros deseos, lo que puede llevarnos a perseguir metas y objetivos que no son realistas o deseables.

Nuestra generación se encuentra en una terrible encrucijada, nada es de nuestra propiedad, leasing para tu carro, renta para tu vivienda y arrendamiento para tu teléfono. 

Somos un ave nacida en jaula, nada es tuyo, tu alma propiedad de un banco, tu cotidianidad ciervo del capital y tus sueños esclavos del sistema. 

¡Hay que adueñarnos por lo menos de nuestros sueños!


  • Eduardo Emmanuel Ramosclamont Cázares
Más opiniones
MÁS DEL AUTOR

LAS MÁS VISTAS

¿Ya tienes cuenta? Inicia sesión aquí.

Crea tu cuenta ¡GRATIS! para seguir leyendo

No te cuesta nada, únete al periodismo con carácter.

Hola, todavía no has validado tu correo electrónico

Para continuar leyendo da click en continuar.