Con el resultado preliminar a favor de Morena y Nueva Alianza en el municipio de Cuautepec de Hinojosa, se cierra el proceso de renovación de los 84 ayuntamientos de este 2024.
Aunque falta por oficializarse ante las autoridades electorales, el triunfo virtual del candidato Jorge Hernández Araus cierra un capítulo que ya estaba comenzando a estorbar dentro de las oficinas políticas estatales.
Fue un largo proceso para que se llegara a la jornada de este domingo 1 de diciembre, a prácticamente un año de distancia desde que comenzaron los trabajos en el Consejo Local del IEEH, pero finalmente se pudo concluir de manera satisfactoria una votación más para la entidad.
Lo que no queda bien, como era de esperarse, es el tema de la participación ciudadana, ya que únicamente acudieron a las urnas de Cuautepec el 39 por ciento del electorado registrado en la zona, lo que la convierte en una de las elecciones con más baja asistencia.
Sin embargo hay varios factores que intervinieron para ello, el principal, el tema de que hubo mucho desgaste con el tema de repetir la elección en Cuautepec luego de que se anulara en agosto pasado donde previamente había ganado el mismo Jorge Hernández Araus.
Segundo, el tema de la seguridad pública que de tanto mencionarse parece que espantó al electorado o alimentó la apatía social.
Tercero, que la oferta política no se esforzó por llegar al corazón de la gente y simplemente cumplieron con la encomienda de las dirigencias de partidos políticos para participar, pasar lista y ahora cobrar próximamente desde el cabildo.
Parece ser un camino muy fácil el de la política en los municipios de la entidad, pero el hecho de que allá sido poca la gente que salió a votar debería preocupar mucho (y al parecer no se inmutan en lo absoluto) a los políticos mexicanos en general.
El rechazo ciudadano a las formas en que se conducen y a sus discursos reciclados, son parte del hartazgo que apenas en los inicios de esta nueva era de transformación, ya lucen desgastados y sin espacio para las nuevas generaciones.
Por mientras, no parece incomodar a nadie que haya un ganador de una elección con muy baja participación. Al final todos quedan dentro del mismo equipo.