Tal y como lo habíamos señalado, la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial Federal, resolverá a favor de Jesús Pablo Lemus Navarro la elección como gobernador constitucional del Estado Libre y Soberano de Jalisco, así se desprende del proyecto de sentencia contenido en 139 hojas que hace una horas se dio a conocer, elaborado por el Magistrado Felipe Alfredo Fuentes Barrera, mediante la cual desecha impecablemente los argumentos de la candidata Claudia Delgadillo González, simplemente por no gozar de interés jurídico para controvertir la sentencia del Tribunal electoral local, ya que ante esa instancia únicamente compareció como coadyuvante en uno de los juicios de inconformidad presentado por Morena, esto es al no apersonarse en forma independiente en dicho tribunal inferior contra los actos que fue a reclamar ante la Sala Superior, ya que, insisto, solo se apersono como coadyuvante del juicio presentado por Morena. Dicho proyecto se someterá a la consideración del resto de magistrados de la Sala Superior el próximo miércoles.
Uno de los agravios que plantearon los de Morena llama la atención puesto que su argumento se basa en que el Tribunal electoral estatal no atendió la discrepancia entre la totalidad de votos de la gubernatura en Jalisco frente a la de la presidencia de la República, agravio por demás divertido, porque desde el principio de la jornada electoral todos los jaliscienses notamos que el voto sería claramente diferenciado, sin que Morena en el juicio pudiera probar que la diferencia provino de irregularidades y falta de certeza en los resultados de la elección. Lemus gano la elección por una diferencia de ciento ochenta y seis mil setecientos sesenta y cinco votos, los cuales en gran parte provenían de la zona metropolitana de Guadalajara, en especial del municipio de Zapopan.
Como en las demás resoluciones de la Sala Superior en contra de Morena el proyecto califica, nuevamente, de inoperantes, insuficientes, e infundados los argumentos hechos valer, por ello en el proyecto “se confirma el computo estatal, la elegibilidad y la declaración de validez de la elección a la gubernatura en Jalisco, así como la entrega de la constancia de mayoría expedida a favor de Jesús Pablo Lemus Navarro”.
Debemos recordar que en cualquier juicio existe un principio que no podemos ignorar, que es: “El que afirma tiene que probar” y a juicio del Magistrado ponente los actores no lograron probar que existiera indebida intervención de servidores públicos en la elección y en los cómputos electorales; menos que hubiera existido inequidad de medios basada en estereotipos de genero; y menos que existiera indebida actuación del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana del Estado de Jalisco o del Tribunal Electoral del Estado, argumentos que uno a uno destroza el ponente en su proyecto.
En el caso de la supuesta inequidad de los medios de comunicación supuestamente por razón de genero el proyecto señala que lo ineficaz del agravio reside en que, las expresiones del candidato y el contenido de unos informes de monitoreo de medios son insuficientes para demostrar la existencia de estrategia mediática en contra de Morena que haya influido en lo voluntad de la ciudadanía, concluyendo que las expresiones coloquiales de Lemus en torno a la relación de la candidata de Morena con algunos políticos como Peña Nieto o Alito, sirvieran como factor detonante para una cobertura inequitativa de parte de los medios de comunicación y menos porque por sí mismas no resultaron discriminatorias, por lo que no se demostró en forma alguna que haya existido una campaña discriminatoria en contra de Claudia.
Es cierto, aún falta la votación de los demás miembros de la Sala Superior del tribunal, pero cuando las sentencias se dictan en el caso de Claudia por no gozar de interés jurídico para controvertir la sentencia del Tribunal electoral local, y en el caso de Morena porque sus argumentos planteados son calificados como inoperantes, insuficientes, e infundados es sumamente difícil que los demás Magistrados voten en otro sentido.
En otro tema, cada día da mas pena el comportamiento arrabalero de la autodenominada ministra del pueblo, Lenia Batres, quien en la sesión del jueves se molesto porque la Ministra Presidente, Norma Piña la conmino a dejar de usar calificativos de sus colegas, solo le pidieron que dejara de ofender, y su respuesta fue que se le indicara que ley o reglamento se lo impedía, cuando la ministra Piña le señalo la normatividad que lo señalaba, solo se molestó más. Debemos señalar que hasta las otras dos ministras afines a Morena les da pena ajena las expresiones y comportamiento de Lenia quien cada sesión se muestra más prepotente, grosera, vulgar e notoriamente incompetente. Que miedo que asi lleguen los ministros, magistrados y jueces provenientes de la reforma judicial.