Pemex

La nota de los últimos días ha sido el desabasto de gasolina en algunas regiones del país, principalmente en el bajío y la zona metropolitana de la Ciudad de México. La estrategia de combate al denominado “huachicoleo” –robo de combustible de los ductos de Petróleos Mexicanos- ha alterado la red de distribución, con las consecuencias de compras de pánico y gasolineras cerradas.
El punto más relevante de esta situación es el objetivo central: la recuperación de Pemex. Para las entidades que tienen actividades vinculadas a la industria del petróleo, este es un tema importante, porque se tiene la memoria histórica de los beneficios que representa para la actividad económica de la región.
La recuperación de Pemex, para beneficio de todos los mexicanos, debe ser con inteligencia, además de contar con la suficiente información tanto en el ámbito internacional como con la correcta perspectiva financiera que requiere la principal empresa del Estado.
Resulta lamentable que se hayan abandonado las refinerías, como la de Ciudad Madero aquí en Tamaulipas, que se reconfiguró hace casi 18 años, a un costo altísimo, y esta al igual que otras refinerías, parada pero con un alto costo de operación.
Es momento de recuperar la grandeza de Pemex, pero desde la modernidad y sin entreguismos. Hacer de Petróleos Mexicanos una empresa productiva, moderna y autosuficiente, pero sobre todo sin una carga fiscal tan pesada.
Contar con los apoyos federales que fomenten el desarrollo regional de cada estado con vocación energética, y que el país cuente con un crecimiento sostenible, y en consecuencia, también los sectores productivos, ¿no cree Usted?