De la misma manera en que Donald Trump anuncia que la nación que quiere ir a poblar Marte con clones de Elon Musk ahora anuncia que va a regresar al carbón, la derechairiza en éxtasis defiende la idea de que la fiesta brava será sangrienta e hiperviolenta o no será. Hay que reconocer que hay congruencia en la onda retrógrada, conservas en almíbar y en la dicha inicua de situarse en el lado más casposo y artrítico de las ideologías.
Qué pensarán los derechairos ecologistas que ya querían prescindir del petróleo por arcaico y contaminante (por algún extraño delirio, los xochilistas creían que ya andábamos en DeLoreans voladores como en Regreso al futuro), cuando su héroe —el agente anaranjado— va a resucitar un material que deja más huella de carbón que los misiles que los gringos echaron en Yemen para apoyar al humanista Netanyahu. Sin duda saboreo las acciones comprometidas que emprenderán ecologistas de la talla de Eugenio Derbez y el gritante de Café Tacvba, seguro harán huelga de hambre hasta que el carbón solo se utilice para la carnita asada.
Como quiera que sea, es bonito de ver que la Opo, a pesar de estar hasta abajo hasta abajototota en las encuestas y en el ánimo de los votantes, buscan recuperar algo del rating perdido. Lamentablemente no sé qué tanto les pueda funcionar defender con tanta enjundia y nulos argumentos a la hermana de Xóchitl Gálvez que ahora quieren disfrazar de madre buscadora. Si no le funcionó al #SacoDePus, Javier Lozano (que acabó de hundirse cuando reiteró su orgullo por apoyar a la narcoguerra calderonicolita), menos le va a funcionar a Malinali sobre la que pesan tantas acusaciones, investigaciones judiciales y periodísticas, la veldá.
Y menos si recordamos ese tuit del Chapitas Eruviel, donde cuenta que siendo gobernador la señora X le pidió que sacara a su síster del tambo y que como no la complació le tiene mucha muina.
Tampoco se ve muy bien que los opositores aplaudan el supuesto video de CJNG, que casi ni se ve que es un homenaje a Loret #LordMontajes y a García Luna Productions. El discurso parece sacado de los libros de Cascabel Hernández.
Algo que solo se puede comparar con el costoso andamiaje de trolls, bots y jéiters que acusan a la presidenta Sheinbaum y a López Obrador de estar coludidos con el narco. Muy aparatoso, pero poco provechoso.
Ahora que desclasificaron los documentos sobre el asesinato de JFK, Alazraki y sus paleros esperan que todo sea culpa de AMLO y de la Presidenta.
Están carbones.