¿Quién renunciará primero, Yon De Luisa a las selecciones nacionales de panbol después del fracaso en Qatar, o Ricardo Monreal, que tres veces engañó a las fuerzas vivas de Morena con la oposición (la primera por coraje, la segunda por capricho y la tercera por placer) y que por lo tanto es tan apreciado como un ataque de dispepsia?
Me dicen que los momios en Las Vegas se inclinan a favor de Yon, al que sus jefes lo quieren ahorcar después de haber perdido varios cientos de millones de pesos en patrocinios, comercialización y en merchandaicing que se va a pudrir en las bodegas. Si lo dejan, y con el coucheo de Fantasías Mikel Arriola, es capaz de armar un numerazo como el de los cachirules en 1990.
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Después de quedar como el perro de las dos tortas, lo más seguro es que Monreal se aventará una machincuepa mayestática de las que acostumbra para hacerse la “vístima” y quedarse en Morena, donde continuará apoyando a sus amiguis de la oposición. Guarden este tuit porque en la Gira del adiós con Santi Creel (la auténtica reconciliación será entre ellos) sin duda que mi Richard va a estar en contra del 20 % de aumento al salario mínimo (alegará que va a generar inflación como dicen los empresarios que solo invierten el 8% en materias salariales); dirá que la caída del dólar es solo para molestar a Loret y a Chumel; estará de acuerdo con Porfirio Muñón Lerdo en el sentido de que AMLO es peor que Hitler y con Pedro Ferriz afirma que López hace magia negra; también apoyará a la whitexicaniza kukluxpanista que representan Leo Zuckerman y la dotora Dresser (que cada vez se parece más a Sandra Cuevas y no puede engañarnos), que alegan que en la llamada Madre de todas las marchas faltaron la Gordillo, Madrazo, Fox y Margarita para considerarla verdaderamente democrática. Además, para ellos había pura feligresía pejezombie zarrapastrosa y morenaca.
Me dicen que el zacatecano ya está buscando que lo entrevisten a modo Loret y Brozo, una vez que regresen de Qatar de la mano del señor Olamendi, mano derecha de Chiflano Aureoles, y el que cuentan las malas lenguas que es el patrón en Latinus y al que según esto no conocían y que se encontraron casualmente en los estadios.
Y ya para rematar, se los juro jurito, Monry va a votar en contra de la reforma electoral en solidaridad con Claudio XXX que, mientras asegura que México está al borde del colapso, con lágrimas en los ojos contempla que la canasta básica está a la baja. No se vale.
Jairo Calixto Albarrán
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