No me acordaba que se había convocado a una marcha de la falsa Genercion Zzzz que quería acabar con la dictadura claudista. Bueno, tampoco es que sorprendiera a nadie que aquello estuviera más triste y desolado que el desparecido PRD. Los vendedores de banderitas de la calaverita con sombrero estaban muy decepcionados porque no se paraban ni las moscas.
Y mucho menos la momiza derechaira que se quiso hacer pasar por chaviza como Acosta Naranjo y sus patitas de molcajete, o Xóchitl Gálvez, la ex candidata fallida del PRIANChu, el ChikiliQuadri o Margarita Zavala que ahora está muy preocupada por correr de San Lázaro a los de Proyecto Escolar por hacerle preguntas incómodas a ella, Alitititito Moreno (no se vale que lo cuestionen por el precio del kilo de botox), al panista tal por si le molesta que le digan que es Alito 2 (se parecen tanto entre ellos, que parecen júniores tóxicos del señor Spock), y a Sergio Mayer que no supo contestar si prefería la Casa del pueblo o la Casa de los famosos.
No se vale. Es como si le preguntaran a María Amparo Casar si no le dan ñáñaras porque en estos momentos aciagos donde se le investiga por cobrarle una pensión muy dudosa a Pemex (o sea, el marido trabajó 10 minutos en la paraestatal y casi le dieron una pensión nivel del vivales de José Ángel Gurría), la anden apoyando puro cartuchazo quemadísimo como que no te haga bobo Edmundo Jacobo, el #SacoDePus y Krauze, que nada más me la acaban de desprestigiar.
Bueno, ya lo más aburrido y sin gracia que los algoritmos de Ferriz son los 4 fanáticos de Casar que alegan que es una persecución política. Échenle más imaginación, por lo menos digan que este es un compló soviético-chavista como diría María Corina, donde están metidos masiosare un extraño enemigo y el soldado comunista del amortz en esta guerra entre tú y yo.
En esas Javier Solórzano también se chumelizó bien gacho. Nada más le faltó asegurar como Adela Micha que Chesarito Duarte, ese amigo de lo ajeno, es bueno, santo y puro.
Algo tan ridi como Claudio XXX y el Saco de Pus asegurando que importantes figuras de la cuatroté les piden en secreto que sigan dando la batalla. Ese chiste se hizo viejo en el mismo momento en que lo soltaron. Yo sí les creo porque también soy bien mentiroso.
O sea, con razón no fue nadie con la Generación Zzzz. Salvo los racistas guadalupanos de Laura Zapata y los delirantes conspiranoicos que creen en el algoritmo de Ferriz que dice que esta es una dictadura.
#NoMaMarx