Bonsái: árbol diseñado para vivir siempre pequeño y nunca crecer.
En política, como en otros asuntos de la vida, el tamaño importa. Por eso ha sido una sorpresa, la enorme dificultad para obtener las firmas de apoyo que requieren los candidatos independientes a la Presidencia: solo dos han alcanzado más del 15 por ciento necesario. Otros, sufren sin alcanzar 5 por ciento.
Se diría, sin demeritar de ninguna manera su esfuerzo, que todos parecen candidatos bonsái: condenados a permanecer diminutos.
Las razones de ésta falta de sustento para los independientes están por configurarse. No están identificadas plenamente. De ahí la confianza con la que se lanzaron al ruedo.
¿Será la indiferencia ciudadana a todo lo que huela a política? ¿Margarita, Bronco, Marichuy, Ríos o Ferriz no son atractivos? ¿Quizá la aplicación diseñada por el INE no sirve? ¿Poco a poco irán aumentando las firmas, hasta alcanzar la meta? ¿Solo las estructuras partidistas movilizan a la ciudadanía?
Lo cierto es que el fenómeno bonsái también abarca a los partidos: ¿cuántos años tiene el PT sin crecer? ¿De veras el Verde y el Panal tienen espacio para aumentar su membresía? ¿Será posible que tengamos algún día un presidente egresado de Movimiento Ciudadano o del PES?
Pero también padecemos políticos bonsái. Voluminosos físicamente, pero ética y profesionalmente pequeños. ¿O cuál es el tamaño verdadero de los ex gobernadores presos? ¿Y los, por todos conocidos, sobornados por Odebrecht?
Podemos decir sin exagerar, que somos un enorme país dirigido por bonsáis: partidos, candidatos, burócratas, legisladores, jueces, empresarios en su mayoría: bonsái.
Sin duda, hay excepciones. Personas que han ejercido cargos públicos y viven en la medianía, comunicadores que arriesgan la vida para difundir su verdad y todos los que se esfuerzan en diferentes frentes por actuar con honestidad.
Preguntas para el clásico:
¿Quién hizo bullying a quién?
¿Hidalgo al Imperio Español?
¿Juárez a Maximiliano?
¿Madero a Porfirio?
¿Cárdenas a las compañías petroleras?
¿Los estudiantes a Díaz Ordaz?
¿Los dreamers a Trump?
¿Los ciudadanos a la policía?
alvalima@yahoo.com