La designación de la presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, es sin lugar a dudas una mala broma, ya la vez pasada la habían elegido con una trampa haciendo un juego de manos con los votos, pasaron 5 años en donde su principal función fue no funcionar, vivimos el sexenio más sangriento de la historia, estuvo lleno de violaciones a derechos humanos por todas las autoridades sin que la comisión hiciera realmente nada
Ahora todo fue completamente absurdo, ¿Para qué simulan un proceso de evaluación si luego van a poner en la terna a la peor? No tiene caso hacer análisis y entrevistas si al final vas a poner a quien te de la gana, alguien que ya probó su ineficiencia, que presentó una carta de recomendación falsa, ¿Cómo es posible obtener las peores calificaciones si ya estuviste en el puesto? Se supondría que conoces del tema mejor que cualquier otra persona.
Esto es preocupante para el destino de los derechos humanos en México, el cual ya sabemos será la invisibilidad, pero también es una muestra terrible de la forma en que se hacen mal las designaciones, poner al peor porque es mi gente, porque pago favores, aseguro comodidad en un gobierno sin señalamientos y no importa que las instituciones no funcionen.
Son actos de poder que dicen “puedo hacer lo que quiera, no importa que esté mal, ni me preocupa ni quiero mejorar, porque soy poderoso y puedo ser corrupto y mal hecho, me alcanza para eso y más”; son cínicamente intocables y así hacen todo mal sin consecuencia alguna, por eso no les importa, ni le disimulan.
¿Así van a ser los nombramientos de ministros, magistrados y jueces? Refrendan que así les gusta hacer las designaciones, ¿esperamos a los peores evaluados, con un expediente integrado con trampas para ser los juzgadores de México?
Viene en Guanajuato un proceso similar, deben nombrar titular de la Procuraduría de los Derechos Humanos, esperemos que el Congreso del Estado no se respalde con lo mal hecho a nivel federal para hacer lo mismo, ojalá que si analicen los perfiles de los candidatos y candidatas y elijan a una persona preparada, comprometida e independiente, que si conozca del tema y no venga alineada. Espero que Guanajuato sea diferente y marque distancia de estas malas mañas y nos den una buena Procuraduría de los Derechos Humanos.
Que las cosas funcionen sin trampas y arreglos políticos no es mucho pedir, pero parece tan imposible.