Esta semana se juega uno de los últimos torneos del año que presenta un field de lujo. El HERO World Challenge regresa de nueva cuenta a Bahamas en donde el número uno del mundo, Scottie Scheffler, estará presente junto a Jordan Spieth, Keegan Bradley, Justin Rose, JJ Spaun, Billy Horschel, Hideki Matsuyama, Sam Burns y Harris English, en el cual únicamente participan 20 profesionales.
El anfitrión del evento es Tiger Woods, ya que beneficia a su fundación y en otras ocasiones habría aprovechado para regresar al golf, pero esta vez no será la ocasión. Tiger tuvo una conferencia de prensa con los medios el martes pasado, en donde habló acerca de cómo evoluciona su recuperación y sobre su futuro como una estrella del golf.
Tiger se sometió a una operación de reemplazo de disco en la espalda, es la segunda en menos de un año y la séptima desde el 2014. También tuvo una operación en el tendón de Aquiles a principios de año. A pregunta expresa de cuándo volvería a competir, solo se limitó a decir que hace una semana había empezado a pegar unos chips y unos putts en el patio de su casa en Florida y que le haría muy feliz poder volver a jugar pronto.
El último torneo en el que actuó fue el Open Championship en julio del 2024 y de los cinco torneos que participó solo pasó el corte en Augusta. Ya era costumbre verlo jugar junto a su hijo Charlie el PNC Championship a fin de año. También se perdió el Genesis (su torneo) y el inicio de la temporada de TGL en marzo.
Tiger cumplirá 50 años el 30 de diciembre y todos esperaban su debut en el Champions Tour, que ya se había declarado listo para recibirlo, donde jugaría solo 54 hoyos y en carrito de golf. Solo le falta una victoria para romper el récord de todos los tiempos de Sam Snead con 82 victorias.
No ha podido jugar más de siete torneos por año desde 2019 y al parecer cada vez será más complicado verlo competir. Por lo pronto verlo caminar sin dolor, es un gran alivio para todos sus fans, aunque les aseguro que esa victoria (la número 83) no sale de su mente.