La mitad de los mexicanos entre 18 y 40 años cree que cuando sean viejitos los mantendrán sus hijos. Este dato incómodo lo reveló la nueva encuesta de Amafore Ahorro y Futuro: ¿Cómo viven los jóvenes el retiro?
Esta terrible certidumbre de dependencia es más aterradora conforme uno revisa los datos que reflejan cómo esa generación vive y concibe el retiro.
Estos mexicanos creen que los deberán mantener porque ellos (51 por ciento) aportan al mantenimiento de un adulto mayor, o estiman (75 por ciento) que en el futuro se harán cargo de uno.
Los adultos mayores en México afectan a quienes intentan generar su patrimonio más allá de lo económico. Cinco de cada 10 acepta que ha sacrificado algo por el cuidado que dan al adulto mayor que vive en su casa. 37 por ciento dice que esta situación afecta su estado de ánimo hoy. Incluso tres por ciento dice que alguien en su familia dejó de estudiar por cuidar a un abuelo o abuela. Además, 71 por ciento perciben que su tiempo libre en el futuro será comprometido por tener a su cargo a un mayor de 65 años.
Pero le cuento, querido lector, lo que más me preocupó de la encuesta de Amafore: los mexicanos entre 18 y 40 años no tenemos idea de qué son y cómo funcionan las Afores aun cuando, en principio, todos nos retiraremos con lo que juntemos en esa cuenta individual.
Si bien 8 de cada 10 mexicanos conoce o ha escuchado hablar de las Afore, la mayoría (39 por ciento) las relaciona con ahorrar para una emergencia, administrar o guardar dinero. Después, se piensa en “dinero extra” o un seguro de vida. En el cuarto sitio de relación aparece que cinco por ciento piensa en el retiro al escuchar la palabra Afore. No tener idea de cómo se comen las Afore incrementa la posibilidad de que nuestro futuro dependa de las capacidades económicas de otro.
Cuatro de cada 10 dijo que las Afore son del gobierno, otro 40 por ciento que son privadas, seis por ciento respondió que son de ambos. El resto, no contestó.
Un último dato: 70 por ciento ahorra y el segundo objetivo de ahorro es el retiro o la vejez, pero solo 3 de cada 10 ahorradores guardan su dinero en un instrumento formal. ¡Ya ni pensar en inversión!
Para cualquier mexicano —ya sea estudiante, esté iniciando su primer trabajo, haya empezado una familia o enfrente el cuidado de sus padres— es muy difícil prepararse para el retiro. Yo lo vivo a diario: ¿junto dinero para el retiro, la educación de los niños o unas vacaciones? No es una decisión sencilla, pero menos lo será si no sabemos cómo hacer crecer el dinero, cuánto tendremos en el futuro y en dónde trabaja ese dinero hoy.
Si tenemos el objetivo del retiro en la mente, pero no hacemos la tarea de informarnos, en algún momento ¿estaremos preparados?
@vivircomoreina