El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, precisó que, tratándose de migración y fentanilo, no es justo comparar a Canadá con México.
Ciertamente cada país experimenta estos fenómenos de distinta manera y sin embargo tampoco es objetivo asumir que nuestro país sea más responsable que sus socios en los problemas causados.
Las empresas que se dedican al tráfico de drogas y migrantes son, por su naturaleza, transnacionales. No es sólo que sus actividades se desplieguen a lo largo del subcontinente americano, sino también que sus directivos están distribuidos en ciudades que pertenecen a los tres países.
En los hechos, la necedad de distinguir entre oferta y demanda es solamente política. ¿Por qué suponer que un negocio es mexicano únicamente porque de este lado se genera la oferta cuando cruzando el Río Bravo ocurre la demanda?
Es engañoso mirar este fenómeno criminal como meramente mexicano cuando el grueso de las ganancias se producen en Estados Unidos y también en Canadá. Si se calcula, por ejemplo, la derrama que deja la migración es fácil confirmar que el valor agregado que aporta el factor trabajo relacionado con este fenómeno es mucho mayor en Estados Unidos y Canadá.
Suele calcularse la ganancia de la migración en función de las remesas. Sin embargo, éstas son solo una fracción, marginal, de los ingresos generados por los trabajadores ilegales insertos en la economía norteamericana.
Cuando el gobierno estadunidense amenaza con poner impuestos a las remesas olvida el margen de ganancia amplísimo que dejan los trabajos que emplean intensivamente a las personas migrantes.
El mismo argumento corre para el tráfico de fentanilo. Las ganancias que este negocio deja en México son pingües. Eso es innegable, pero también lo es que quienes realmente consiguen cantidades millonarias son aquellos que, desde Estados Unidos y Canadá, agregan valor al negocio proveniente de esta droga.
Zoom: Es hipocresía pura acusar a México de un negocio que es trilateral. Demagogia política insostenible cuando se mira de frente la realidad. Dicen que no es justo comparar a México con el resto de Norteamérica y tienen razón. Los negocios del fentanilo y la migración son muy superiores, en ganancias, para el norte, en comparación con el sur.