Así como hace años adoptamos la palabra googlear o guglear como un neologismo para referirnos a la acción de buscar información en internet, es posible que en el futuro hablemos de promptear cuando interactuemos con la inteligencia artificial (IA).
Hoy en día, al usar modelos como ChatGPT o cualquier otra IA generativa, lo hacemos de manera fluida, formulando preguntas o instrucciones que nos permiten obtener respuestas útiles de forma natural.
¿Qué es un prompt y cómo aprovecharlo en la IA?
En el contexto de la IA, un prompt es la instrucción o texto que se le proporciona a un modelo de lenguaje, como GPT, para generar una respuesta.
Es el punto de partida de cualquier interacción con la IA, y su diseño influye directamente en la calidad y precisión de las respuestas que se obtienen.
¿Por qué es importante el prompt?
La forma en que se redacta un prompt es crucial. Si un usuario introduce una instrucción vaga o ambigua, es probable que reciba una respuesta poco clara o fuera de contexto.
En cambio, un prompt bien formulado, claro y específico, conducirá a una respuesta precisa y útil.
Tipos de prompts
Existen diferentes tipos de prompts según el propósito que persigan:
Instruccional: Solicitan a la IA realizar una tarea específica, como generar una lista o explicar un concepto.
Creativo: Se usan para pedir a la IA que genere contenido original, como una historia o un poema.
Clarificación: Se utilizan cuando el usuario necesita una explicación más detallada o un desglose de un tema.
Cómo diseñar un buen prompt
Para sacarle el máximo provecho a la IA, es importante tener en cuenta algunos principios para redactar prompts efectivos:
Claridad y precisión: Evita la ambigüedad. Un prompt claro ofrece mejores respuestas.
Especificidad: Si quieres una respuesta detallada, sé específico en tu pregunta o instrucción.
Contexto: Proporcionar contexto relevante puede ayudar a la IA a ofrecer respuestas más exactas.
¿Es estrictamente necesario un prompt formal para interactuar con la IA?
Aunque no es necesario estructurar de manera formal un prompt para interactuar con la IA, hacerlo puede ser útil cuando se desea afinar o controlar mejor el tipo de respuesta que se busca.
Al igual que cuando hablas con un experto, cuanto más clara y detallada sea tu instrucción, más precisa será la respuesta.
Por ejemplo, si le pides a la IA de manera informal: “¿Me puedes explicar qué es el aprendizaje profundo?”, la IA interpretará la solicitud y dará una respuesta clara.
Sin embargo, si quisieras una respuesta más específica, podrías estructurar un prompt como: “Explica qué es el aprendizaje profundo, enfocándote en sus aplicaciones en la medicina y dando ejemplos de diagnósticos médicos”.
El diseño de prompts formales ofrece ventajas clave cuando necesitas respuestas más específicas, al abordar tareas complejas, o cuando buscas optimizar el tiempo.
Un prompt bien estructurado permite que la IA entregue resultados precisos sin necesidad de preguntas de seguimiento o correcciones adicionales, acelerando así el proceso.
De este modo, los prompts no solo son la puerta de entrada a la inteligencia artificial, sino también la clave para sacarle el máximo provecho.