Ayer se dieron a conocer los nominados a los Globos de Oro, que se entregarán el próximo 11 de enero en Los Ángeles, y hay mucho que anotar. Empecemos por lo obvio: Wicked: For Good no recibió nominación como película en comedia o musical, aunque Ariana, Cynthia y las canciones nuevas sí. Me parece bien. Ni en el teatro ni en el libro es mejor el segundo acto que el primero.
La complejidad de unir tantas categorías en “musical y comedia” dejó fuera también a K-Pop Demon Hunters, pero, siendo honestos, ¿hay un mundo en el que esta animación compita frontalmente contra Paul Thomas Anderson (One Battle After Another) o Yorgos Lanthimos (Bugonia)? Resulta que no.
Para eso está la todavía nueva categoría de Logros cinematográficos y de taquilla. Notable, porque este título se volvió un fenómeno en Netflix y luego en cines, asunto clave en el panorama actual de la industria.
Weapons, la extraordinaria cinta de terror que nos gustó incluso a quienes padecemos el género, recibió dos nominaciones, incluyendo a Amy Madigan como la tía Gladys. De todas las brujas nominadas este año, esa es la que más me impactó en 2025. Y ojo: la fuerte presencia internacional confirma que el cine de fuera ya no pide permiso, sino que exige su lugar en la mesa principal.
Pódcasts. Es el primer año de la categoría, reflejo de cómo éstos —sobre todo en video— están reemplazando a la televisión. Los más polémicos, como Candace Owens y Tucker Carlson, quedaron fuera pese a sus millones de seguidores.
La comedia destacó con Dax Shepard y Amy Poehler; la autoayuda con Mel Robbins; y lo noticioso con Up Next de NPR. Con esto arranca oficialmente la temporada de premios. Seguimos pendientes de grandes cintas como Hamnet (6 nominaciones) y Sentimental Value (8), que aún no llegan a nuestro país.