Han sido días interesantes por muchos motivos, entre ellos el éxito que han tenido las historias de cómo la gente es despojada de su dinero en la vida real, cuando son convertidas en una serie o documental para la plataforma de streaming. Realmente ha sido más que interesante ver cómo Netflix tiene el pulso en lo que quiere la gente, y el caso del mal llamado
Simon Leviev, conocido ya como El estafador de Tinder en el mundo entero, no es cosa menor. Un documental hecho de principio a fin con los testimonios de las víctimas de este hombre, y los registros en WhatsApp de cada conversación, video y amenaza de viva voz no pueden ser ignorados.
Parece que la técnica de ignorar las pruebas y gritar a los cuatro vientos que nada de lo que vemos es verdad no es de uso exclusivo de la política. Y así es como a este hombre le están pagando por entrevistas para negarlo todo, sin prueba alguna. Después de pasar un breve rato en prisión y ser declarado culpable. No importa, mentir hasta el final parece ser la clave.
Y está la miniserie de la brillante Shonda Rhimes (Grey’s Anatomy) respecto a la estafa multimillonaria perpetrada por la mujer que se hace llamar Ana Delvey, quien desfalcó a la elite cultural y banquera de NY por millones de dólares en la vida real, haciéndoles creer que era una heredera alemana con enormes planes para promover el arte. Viendo los reportajes, uno de 60 minutos particularmente bueno, respecto a este personaje queda más que claro: cualquier cosa puede pasar cuando queremos creer en alguien. No importa que no haya nada para sustentarlo.
Twitter: @susana.moscatel