La crisis por la que atraviesa la Cruz Roja, Delegación Zona Sur, integrada por los municipios de Tampico, Ciudad Madero y Altamira, es sumamente preocupante, llegando al punto de no contar con suministro de gasolina para el uso de las ambulancias y, en otros casos, algunas unidades descompuestas.
Afortunadamente, la vocación de servicio de los elementos de la benemérita institución y con el apoyo de empresas privadas a través de sus ambulancias han podido continuar cumpliendo con sus servicios de atención médica.
La comunidad de la zona conurbada parece haber olvidado retribuir a la Cruz Roja ayuda para que sigan cumpliendo los principios de la institución, entre los que se encuentran la humanidad, imparcialidad, neutralidad, independencia, voluntariado, unidad y universalidad.
Desde su establecimiento oficial en 1907, cuando el entonces presidente Porfirio Díaz firmó el decreto de su creación, fue una de las primeras filiales en América Latina.
La organización ha desempeñado un papel clave en la atención de desastres naturales, como los terremotos de 1985 y 2017, y durante la pandemia de covid-19.
De manera diaria, proporciona a la comunidad servicios de emergencia y atención médica, siempre procurando dar lo mejor de sí para alcanzar el propósito de salvar vidas.
En los últimos años, la Cruz Roja ha enfrentado desafíos financieros que han limitado su capacidad para operar; la falta de recursos y la ausencia de donaciones suficientes han impactado directamente en la capacidad de respuesta a emergencias de diversa índole.
Ante la situación por la que atraviesa la institución y porque es un pilar del sistema de salud pública, es urgente llamar a la acción comunitaria y al sector empresarial de la región para apoyar a una dependencia que históricamente ha sido vital en emergencias.
Ya no basta con darles el paso a las ambulancias cuando pueden acudir a un servicio; ahora se necesita, de manera urgente, mostrar una vez más la solidaridad de las autoridades, empresarios y sociedad civil con la institución a través de donaciones y campañas de ayuda.
De ello depende, en gran parte, salvar una vida. En algún punto de la zona sur, alguien puede necesitar de la atención del personal de la Cruz Roja, y es imperante que acudan en su auxilio sin ningún tipo de contratiempo.