“Zoé, te estoy mandando todo el apoyo que se requiere” así dice un mensaje de voz que conservó en mi celular. La voz es de la Doctora Claudia Sheinbaum, entonces Jefa de Gobierno de la Ciudad de México. La fecha: 6 de septiembre de 2021. Ese día, en Tula, se nos había inundado el hospital.
Durante la madrugada, una lluvia torrencial había puesto bajo el agua el centro de la ciudad de Tula, incluida la planta baja del Hospital General de Zona del IMSS. Informamos al Presidente Andrés Manuel López Obrador en el gabinete de seguridad y nos instruyó acudir al lugar y llevar toda la ayuda posible.
A mi llegada, el personal del IMSS seguía ahí, no sabían qué había pasado con sus pertenencias, en sus casas, no se habían restablecido las comunicaciones pero no abandonaron el hospital ni a los 40 pacientes, que debían ser trasladados.
Cuando arribó el primer helicóptero de los Cóndores de la Secretaría de Seguridad Ciudadana del Gobierno de la Ciudad de México y los rescatistas del ERUM, nos llenamos de esperanza.
Ese día fue triste y doloroso por la pérdida de vidas humanas pero también un momento en el que se demostró el compromiso del gobierno de México.
Pasado lo más grave y una vez brindado todo el apoyo a las familias afectadas había que recuperar los servicios y construir un nuevo Hospital. Y ahí se presentó un nuevo reto: ¿Dónde construirlo?
Analizamos y visitamos más de 5 predios en Tula, se realizaron levantamientos topográficos, y estudios de mecánica de suelos. Ninguno reunía las condiciones ni de seguridad ni de tamaño.
Entonces el Presidente López Obrador nos dio la solución: lo haríamos en el Terreno de la Refinería en Tlaxcoapan, famoso por una barda que ahora se ha convertido en el espacio para atender una necesidad y para demostrar la fuerza de la voluntad de las instituciones.
Pemex nos donó el terreno, el proyecto ejecutivo lo realizó la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional Autónoma de México, Hacienda liberó en tiempo récord los recursos, se licitó la obra y CEMEX quedó a cargo.
La primera parte del proyecto, la Unidad de Medicina Familiar, fue inaugurada el pasado 22 de septiembre con el Gobernador Julio Menchaca. El Nuevo Hospital General de Zona que se construye, pasó de 43 a 144 camas con respecto al anterior. Representa una inversión total de $2,311 millones de pesos y beneficiará a casi 200 mil derechohabientes del IMSS de toda la región.
La sustitución del Hospital sin duda es una respuesta a la emergencia, pero también a una deuda histórica para una región que en los últimos años, ha tenido un crecimiento en el empleo formal, y por ende, en la población derechohabiente del IMSS.
En 2018 el IMSS en México tenía registrados 20 millones 79 mil trabajadores y trabajadoras. Al cierre de junio de 2024 son 22 millones 319 mil. Es decir: 2.3 millones de trabajadores más, un crecimiento del 11.3% y en Hidalgo el incremento ha sido de 50,882 trabajadores, un incremento del 22% respecto a 2018.
Eso se explica en gran medida por el combate al outsourcing, por las inversiones extranjeras, pero sobre todo por la inversión pública en infraestructura que ha impulsado el crecimiento de la productividad y la inversión privada.
Por eso, saber que en el segundo piso de la Cuarta Transformación seguirán los proyectos de infraestructura debe llamar a instituciones como el IMSS a prepararnos y así lo estamos haciendo.
Este momento que vivimos fue soñado por muchos; el Presidente López Obrador ya sentó las bases de una profunda transformación y ahora tendremos a la primera mujer Presidenta del país, mujer de ciencia que cree en el fortalecimiento de las instituciones públicas y que sabe que por el bien de todas y todos; el Seguro Social es patrimonio nacional.