Este 4 de junio se conmemora el Día Internacional de las Niñas y Niños Víctimas Inocentes de Agresión con el propósito de reconocer el dolor que sufren las infancias en el mundo, quienes son víctimas de maltratos físicos, mentales y emocionales, pero Mexico, así como Hidalgo, se encuentran lejos de librarse de los números y estadísticas, en las que detrás hay historias de vida, futuros truncos y dolor.
La combinación de la violencia con el confinamiento por la pandemia ha sido una mala mezcla, ya que en Hidalgo provocó que 119 niñas y niños hayan padecido agresión sexual, de acuerdo a Yo Te Creo, asociación civil dedicada a la atención del abuso sexual en la niñez.
"Debido al confinamiento que se está experimentando, los datos a nivel nacional nos indican que tres de cada cuatro menores de edad son maltratados en casas mexicanas, lo cual representa un 96 por ciento de incremento; esto con base a datos de 2020.
"En cuanto a datos de abuso sexual en Hidalgo, de 119 niñas y niños menores de edad, de estos casos, 107 son niñas y 12 niños, y 21 de estos casos se desconoce el sexo. Las cifras se han incrementado, sobre todo durante el confinamiento por la pandemia", indicó la psicóloga Melissa Baños Cano, coordinadora del área de psicología y programas psicoeducativos de la asociación Yo Te Creo.
Expuso que, desafortunadamente, el abuso sexual infantil lo perpetran personas cercanas a las y los niños, y con la emergencia sanitaria esto fue en incremento, "porque antes de la pandemia, quienes detectaban estas situaciones eran las y los docentes, por lo que estar en confinamiento resulta ser más complicado", explicó.
Dio a conocer que durante marzo del año pasado, cuando inició el confinamiento, se registró el mayor número de incidencias, "y la semana en la que se registraron más casos fue del 16 al 22 de marzo del año pasado, con 18 casos reportados", reveló.
Madres, más señaladas que los propios abusadores
En este sentido, la especialista de Yo te Creo expuso que el trabajo se enfoca también en las familias, "porque este daño también se mueve hacia las personas integrantes de la familia y que son cercanas a la víctima, y por las cargas culturales y estereotipadas la madre es la más afectada, porque siempre se cuestiona dónde estaba la mamá y por qué no se dio cuenta.
"Es por eso que, en ese sentido, lo que hacemos es dar contención a las familias, en dado caso que la madre lo requiera, por lo que nuestra primera intervención es con las personas a cargo del cuidado de las niñas y los niños", expuso.
Señaló que, a pesar del apoyo que pueden proporcionar a las familias y a la víctima de abuso, muchas veces no completan o detienen su proceso, debido a la falta de recursos, o en el peor de los casos, padres y madres apoyan al agresor "sobre todo cuando son personas significativas o dudan de la palabra de las niñas y niños".
"Pero las niñas y niños no nos están inventando nada, por lo que hay que escucharles porque a veces los adultos creen que son fantasías, y como personas adultas tenemos que saber cómo preguntarles, comunicarnos para saber qué es lo que les pasa", explicó.
Prevención del abuso sexual infantil
Así también, la educación sexual temprana para que las y los niños conozcan su cuerpo, sus órganos sexuales con el fin de que puedan expresar con exactitud lo que podrían estar pasando ante una aversión sexual.
"Aún tenemos unas 20 carpetas abiertas, siguen en proceso y se sigue trabajando con las familias, porque algunas personas los han suspendido o pausado debido a la contingencia, así como la situación económica para poder transportarse”.
"Nosotras que tratamos estos casos nos da rabia y coraje saber de estas situaciones, sin embargo, desde nuestra trinchera siempre está el poder ofrecer ayuda, emprender herramientas profesionales que le permitan sobreponerse a la situación y sobre todo, que reclame justicia", expuso Baños Cano.
El Dato.¿Qué dicen las estadísticas sobre el abuso sexual en México?
Cabe señalar que, de acuerdo a la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), en 2015 México ocupó el primer lugar –entre 33 países miembros– en abuso sexual, violencia física y homicidios de niñas, niños y adolescentes menores de 14 años.En 2010, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) destacó que un 24.1 por ciento de la población nacional justifica pegarle a niñas, niños y adolescentes como método disciplinario; mientras que en marzo del año en curso la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) publicó el primer Diagnóstico sobre la atención de la Violencia Sexual en México, en el que se estimó que 4 de cada 10 personas víctimas de violencia sexual son menores de 15 años de edad.