El pasado 7 de mayo María Fernanda L. fue víctima de tentativa de feminicidio, su pareja sentimental intentó arrebatarle la vida y a pesar de haber sido detenido, fue puesto en libertad de forma casi inmediata; además de ello, la afectada señala que en la Fiscalía General del Estado (FGE) fue revictimizada e incluso no se le han otorgado las medidas de seguridad correspondientes en el caso.
Tras el evento en que William J., de 28 años de edad intentó asesinar a María Fernanda, la víctima acudió el mismo día del atentado ante la Fiscalía Especializada en Delitos de Violencia de Género Contra las Mujeres, perteneciente a la Fiscalía General del Estado (FGE) donde señala que los funcionarios, abogados, médico legista y peritos, no hicieron más que minimizar sus lesiones, cuestionar su comportamiento y poner en duda su estabilidad psicológica.
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Entre otra serie de aspectos que a la denunciante le parecieron irregulares, fue la puesta a disposición de William, quien fue detenido por ciudadanos y agentes de la Policía Municipal de San Andrés Cholula, solo por faltas administrativas y no por delitos de violencia de género, tentativa de feminicidio, daño en propiedad ajena y más.
Además de esto, María Fernanda señala que en ningún momento las autoridades ministeriales le brindaron una copia de su declaración. Mientras que en el Complejo Metropolitano de Seguridad Pública, los peritos pedían a la familia de la víctima un pago de aproximadamente 18 mil pesos para recuperar su camioneta, en la cual se cometió el crimen, misma que William había tomado con engaños de la casa de María Fernanda.
Por lo anterior, la joven poblana piden a las autoridades ministeriales y estatales que tomen cartas en el asunto sobre su caso. Aunado a la petición de justicia, María Fernanda espera que su caso sea el reflejo de la revictimización que viven las denunciantes de delitos de violencia de género durante un proceso que ya de por sí es difícil y que al menos en su experiencia no le ha brindado paz ni justicia.
Continúa el temor
Desde el pasado 7 de mayo, María Fernanda no ha podido encontrar paz alguna, pues con su victimario en las calles y sin las medidas de seguridad correspondientes desplegadas, la joven de 25 años de edad, teme por su integridad y la de sus dos hijos.
Familiares de la afectada, le han reportado el avistamiento de William merodeando por la zona cercana a su domicilio, por lo que ella pide que los agentes de seguridad que la Fiscalía poblana había enviado a su cuidado, se apersonen en su hogar.
Por si lo antes mencionado no fuera conflicto suficiente en su vida, ahora la familia de María debe redoblar los esfuerzos laborales para pagar los daños de su vehículo, mismo que se impactó contra un muro durante el atentado, por lo que también se preparan para denunciar a William por el delito de daño en propiedad ajena doloso.
AAC