Un grupo de 11 personas detenidas por secuestro en el Reclusorio Sur, afirman que son víctimas de los montajes que realizó Genaro García Luna, cuando era titular de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI) para incriminar a personas inocentes en delitos como el secuestro, tal como ocurrió con la ciudadana francesa Florence Cassez.
En entrevista con Alejandro Domínguez para Milenio Televisión, seis de las 11 personas que fueron detenidas el 13 de septiembre de 2006 aseguran que fueron arrestados en diferentes lugares, golpeados a bordo de camionetas para llevarlos a una casa de seguridad donde los obligaron a participar en un operativo armado para que se declararan secuestradores. Todos los implicados aseguran que ni siquiera se conocían entre ellos.
El jueves de la semana pasada el activista Brian Lebaron y familiares de estas personas recluidas presentaron una denuncia ante la Fiscalía General de la República acusando directamente a Genaro García Luna y a uno de sus más cercanos colaboradores, Luis Cárdenas Palomino, por tortura, secuestro, de abuso de autoridad y fabricación de pruebas.
Juan Édgar Quintero, a quien apodaron El Mohamed y señalaron como líder de la banda, niega que así le hayan dicho previamente y que tenga cualquier vínculo con una organización criminal, pero su relato coincide con el del resto de los entrevistados.
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“Salí de mi domicilio dirigiéndome a la zona de hospitales y exactamente donde apenas se acaba de caer el el metro de avenidas labor, ahí me agarraron más o menos entre 10:30 y me empezaron a golpear y me subieron a una camioneta, una Suburban dorada, y me metieron al centro comercial Walmart, me empiezan a dar toques, me empiezan a pegar, empiezan a decir que tengo que decir que me dedico al secuestro” señaló Quintero.
Después de eso lo llevaron a una casa de seguridad donde lo amenazaron con hacerle daño a su familia y lo forzaron a decir frente a una cámara que él era un secuestrado y que llevaba 7 secuestros realizados con anterioridad.
“Como no quise de cooperar con ellos, me empezaron a golpear, me empezaron a poner un trapo en la boca y me amarraban y me echaban agua, me estaban ahogando para que a fuerza dijera que me dedicaba al secuestro; entonces, ya en una de esas, ya no aguantaba, les tuve que decir lo que querían que dijera ellos”, recordó.
Una vez obtenida la confesión, los agentes de la AFI le dieron órdenes de cómo actuar al momento en que los policías irrumpieran en la casa de seguridad para simular la detención de una banda se secuestradores que tenían en cautiverio a una persona.
“Me quitan de la cámara y me ponen en una mesa como si estuviera organizando cosas con otras personas que pusieron igual ahí. A unas mujeres les pusieron a hacer de comer a otras a lavar trastes y que cuando escucháramos el portazo nos íbamos a tirar al piso (…) empezamos a oír que decían 1,2, 3 y tiraron la puerta. Dijeron que eran policías AFIS y nos tiramos al suelo, explicó Édgar.
En la Seido lo llevaron a una cámara donde una licenciada de nombre Martha Astorga llegaba con las víctimas de secuestro y les aseguraba que Juan Edgar eral el líder de la banda que secuestró a sus familiares.
Único sentenciado
Marco Quintero, hermano de Juan Edgar, es el único sentenciado por este caso (49 años), pero afirma que tiene pruebas para echar abajo su caso, pues lo detuvieron en Ciudad Nezahualcoyotl frente a sus vecinos y no en la casa de seguridad en la que realizaron el operativo.
Los relatos de Luis Alberto Garduño Pineda, Edgar Ariel Huerta, Alberto De los Santos González y de Herminio Cid Herrera también se manejan el mismo tenor de que fueron detenidos en diversos lugares, torturados en el traslado y forzados a declarar que son secuestradores frente a una cámara.
Incluso, Alberto de los Santos asegura que el propio Genaro García Luna fue a revisar las detenciones en las galeras de la Seido: “y ahí en mas tarde llega el Genaro luna que hoy sé que es Genaro Luna porque él nos baja a ver a las galeras”.