Arturo Zaldívar, presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación calificó de “crimen de Estado”, el asesinato del juez federal Uriel Villegas Ortiz, y de su esposa Verónica Barajas, y dijo que el gabinete de seguridad del gobierno federal le ofreció apoya para revisar lo protocolos de seguridad de los juzgadores federales.
A través de una videoconferencia con la Barra Mexicana, Colegio de Abogadios, Zaldívar expresó:
“Que no haya duda que éste es un crimen de Estado y que cuando hay un crimen de Estado, todas las instituciones del Estado mexicano estaremos del mismo lado. Aquí no caben las diferencias, no caben las políticas, no caben ninguna otra distracción y estaremos muy atentos de cómo se vienen desenvolviendo éstas investigaciones”.
Indicó que desde un primer momento recibió el apoyo del presidente Andrés Manuel López Obrador, así como del gabinete de seguridad, particularmente del consejero jurídico de la Presidencia, Julio Scherer, y el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, quienes desde un inició se pusieron en contacto para ofrecer todo el apoyo y coadyuvar con las autoridades y “también para que revisemos lo protocolos de las y de los juzgadores federales”.
Reconoció al fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, quien desde un principio “se tomó muy en serio este tema”, y acudió con su equipo para hacerse cargo.
“Él reconoce esta gravedad de un caso como estos y me ha ofrecido todo el apoyo, toda la seriedad y toda la acuciosidad para que se sepa la verdad y se sancione a los responsables. Le tengo confianza personal y profesional al doctor Gertz Manero, esto seguro de que él entiende la gravedad de este hecho y estoy también cierto de que no se escatimarán esfuerzos en este sentido”.
Asimismo, agradeció al gobernador de Colima, José Ignacio Peralta, quien ofreció su apoyo en la investigación. También agradeció el gesto de solidaridad de la Comisión Permanente.
Zaldivar confirma que juez renunció a protección
El presidente de la Corte, Arturo Zaldívar, confirmó que el juez Uriel Villegas Ortiz renunció a la protección federal con la que contaba y mencionó que el Pleno del Consejo de la Judicatura Federal le envió un oficio para que reconsiderara su posición, pero él la ratificó.
Indicó que contra el juez no existía ni una amenaza y que una vez él les comentó que se sentía muy a gusto sin protección porque no corría ningún riesgo, ya que él estaba muy tranquilo.
Zaldívar reconoció que traer un esquema de seguridad trae beneficios, pero también genera incomodidad por que se invade la vida privada. Era un juez serio y muy estudioso, agregó.
El ministro descalificó las versiones que aseguran que se le retiró la protección por un tema de austeridad. “En la protección de los juzgadores nunca ha habido austeridad”, enfatizó Zaldívar, quien dijo que hay una partida especial para proteger a los impartidores de justicia.
bgpa