Caen 3 más por masacre contra la familia LeBarón

Investigación

El arresto ocurrió el pasado 26 de diciembre y ya fueron vinculados a proceso, por lo que parmanecerán detenidos en el penal del Altiplano, en Edomex

Pobladores y familiares revisan un de las camionetas en que viajaban los integrantes de la orden mormona el pasado 4 de noviembre. (AFP)
Ignacio Alzaga
Ciudad de México /

La Fiscalía General de la República (FGR) informó que fueron capturados y vinculados a proceso tres presuntos miembros de la organización criminal La Línea, acusados de participar en la masacre de la familia Lebarón.

Los detenidos son Fidel “V” o Fidel Alejandro “V”, Chiquilín; Juan Carlos “V”, Paketex, y Javier “C”, Cebollín. Hasta el momento suman siete las personas capturadas por este caso.

Los sospechosos fueron arrestados el 26 de diciembre pasado con base en órdenes de aprehensión solicitadas por la Subprocuraduría Especializada de Investigación en Delincuencia Organizada (SEIDO) por los delitos de delincuencia organizada con la finalidad de cometer delitos contra la salud y los que resulten por la muerte de los integrantes de la familia Lebarón.

Un juez del Centro de Justicia Penal Federal con sede en Almoloya de Juárez, Estado de México, concedió los mandamientos judiciales.

Con los datos de prueba aportados por la FGR, el juzgador calificó de legal la detención y dictó a los tres prisión preventiva oficiosa.

La defensa solicitó la duplicidad del término y posteriormente el juez les dictó auto de vinculación a proceso y determinó un plazo de cuatro meses para la investigación complementaria.

Los imputados quedaron internos en el penal federal de máxima seguridad del Altiplano, en el Estado de México.

La FGR dio a conocer que por la secrecía de la investigación, en su momento dará a conocer la situación jurídica que guardan otras cuatro personas que se encuentran bajo la medida cautelar de arraigo, presuntamente vinculadas en el caso Lebarón.

Reporte de la DEA

Los cárteles mexicanos representan la mayor amenaza para las labores que desempeña la Administración de Control de Drogas (DEA, por su siglas en inglés) en Chicago, la tercera ciudad más grande de EU y es el cártel Jalisco Nueva Generación la agrupación criminal que mayor incremento en su poder e influencia ha tenido en los últimos dos años.

El informe de noviembre que elaboró la División de Campo de la DEA en Chicago detalla que los grupos criminales mexicanos trafican principalmente heroína, cocaína y metanfetamina, así como el fentanilo con una pureza inferior al 10 por ciento.

Además, los cárteles como Jalisco Nueva Generación, Guerreros Unidos, del Golfo, de Sinaloa y los Beltrán Leyva emplean una serie de intermediarios para supervisar el envío de drogas a través de la frontera sur del país y así facilitar las ventas a clientes mayoristas y de nivel medio en los principales centros de distribución ubicados en todo el territorio norteamericano.

Los intermediarios clave se establecen generalmente en Estados Unidos, pero mantienen relaciones cercanas con familiares o socios criminales en México.

De acuerdo con la DEA, dichas personas son críticas en las operaciones del cartel, tanto por su capacidad de negociar tratos de drogas como de coordinar las operaciones de contrabando y para ayudar a aislar a los miembros del cártel de alto nivel en México asumiendo gran parte del riesgo, evitando así que la autoridad logre su contención.

Agrega que el fentanilo que llega de China a menudo se compra por internet y es enviado por correo postal, mientras que el que producen los cárteles mexicanos es enviado de contrabando desde la frontera.

El informe reconoce que la disponibilidad y el abuso de estas drogas es alta y los opioides se consumen principalmente en las ciudades, en tanto que en las zona rurales se recurre a las metanfetaminas.

La DEA destaca que el gran volumen de comercio legítimo y la vasta infraestructura del área de Chicago hacen de esa ciudad uno de los centros de tráfico de drogas más importantes.



Balcera en Sonora deja 4 muertos

Un enfrentamiento armado entre pistoleros de pandillas rivales en el municipio de Cajeme, Sonora, dejó al menos cuatro presuntos sicarios muertos. Autoridades locales confirmaron que los hechos ocurrieron durante la madrugada del este lunes en la comisaría de Pueblo Yaqui, ubicada en la zona agrícola. Funcionarios policiacos confirmaron que los investigadores de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal aseguraron armas de grueso calibre, municiones y equipo táctico. También se informó que dos sospechosos resultaron con heridas graves.

Los cuerpos de las cuatro víctimas quedaron en diferentes ubicaciones, en un radio de 10 cuadras, donde los pistoleros se enfrentaron a balazos.

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Con información de: Liliana Padilla

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