El ex presidente Felipe Calderón y su secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, no estaban enterados del operativo Rápido y Furioso, implementado por Estados Unidos durante su sexenio, aseguró Mike Vigil, ex agente de la Administración de Control de Drogas (DEA, por las siglas en inglés).
Luego de que el secretario de Gobernación,Adán Augusto López, asegurara que Felipe Calderón es investigado por tráfico de armas, Vigil lo negó y explicó por qué
"No existe ninguna situación internacional contra Felipe Calderón; aparte de eso te voy a decir y esto es 100 por ciento, ni Felipe Calderón ni Genaro García Luna estaban enterados de este operativo de Rápido y Furioso.
"Te lo digo por esto, que la Embajada de los Estados Unidos en el DF ni el Agregado de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego en la embajada estaba enterado de este operativo. El operativo se llevó a cabo principalmente en Phoenix, Arizona", dijo en entrevista con Azucena Uresti para Grupo Fórmula.
Vigil recordó que García Luna está preso en Estados Unidos, pero por cargos distintos al tráfico de armas y ajenos al operativo que se realizó en secreto, como lo dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador durante su conferencia matutina.
Y respondiendo los dichos del mandatario sobre el Culiacanazo, aseguró que las declaraciones post operativo del ex secretario de Seguridad y actual gobernador de Sonora, Alfonso Durazo, son falsas, pues se trató de una mala estrategia para la detención de Ovidio Guzmán.
¿Qué fue el operativo 'Rápido y Furioso'?
El 26 de octubre de 2009, se reunieron el director del Departamento de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (AFT), Kenneth Melson; el administrador de la DEA, Michele Leonhart; y el director del FBI, Robert Mueller, para iniciar una estrategia secreta contra el tráfico de armas entre Estados Unidos y México, que posteriormente fue llamado operativo Rápido y Furioso.
La operación consistía en dar libertad a las personas acusadas de traficar armas entre Estados Unidos y México, con el fin de seguir la cadena de compra-venta y poder llegar hasta el uso final de éstas, comprobando que las personas detrás de esta operación eran los cárteles de droga mexicanos. Esto tenía el respaldo legal del entonces fiscal federal estadunidense, Dennis Burker.
DMZ