Este martes 18 de mayo alrededor de las 7 de la mañana una niña de 11 años estaba sentada esperando el autobús en Pensacola, Florida, cuando un hombre bajó de una camioneta y la amenazó con un cuchillo, supuestamente para intentar secuestrarla. El incidente fue captado en video, ayudando a las autoridades locales a arrestar al sospechoso.
El hombre fue identificado como Jared Paul Stanga de 30 años de edad por los investigadores de la Oficina del Alguacil del condado de Escambia y ahora permanece detenido sin derecho a fianza mientras enfrenta cargos por intento de secuestro de un menor de 13 años, asalto agravado y agresión. Detallallaron que Stanga, quien fue detenido el martes, tenía antecedentes por delitos sexuales contra menores y vivía cerca de la escuela donde ocurrieron lo hechos, en West Pensacola, que forma parte del condado.
“Atrapamos al animal”, dijo el alguacil Chip Simmons en conferencia de prensa.
El clip muestra a la niña sentada a un lado de su mochila sobre un área cubierta de pasto. Después de unos segundos una camioneta Dodge Journey blanca se estaciona cerca y de su interior desciende Stanga armado. La niña corre antes de ser atrapada, pero el sospechoso la alcanza. Ambos caen al piso mientras él intenta dirigirla al vehículo y ella logra liberarse, recoger sus cosas y correr. El hombre vuelve a subir a su camioneta y huye.
Simmons reportó que alrededor de 50 agentes de la policía trabajaron lo más rápido posible para conseguir el video, buscar testigos e ir de casa en casa para encontrar a Stanga.
“Entendimos que solo teníamos un corto periodo de tiempo”, dijo Simmons. “Queríamos asegurarnos de que no se deshiciera de esta camioneta y que no dejara la ciudad.”
Las investigaciones llevaron a los agentes a la casa de Stanga, donde lo encontraron usando ropa que coincidía con la que el hombre llevaba en el video. También encontraron la camioneta, aunque su defensa trasera ya no era plateada, sino que había sido pintada de color negro.
Simmons contó que el sospechoso también presentaba rastros de “slime” azul en los brazos, igual al que la niña tenía en las manos al inicio del video.
Stanga ya había enfrentado cargos criminales anteriormente, incluyendo ofensas sexuales contra otro menor.
“Nuestra preocupación principal era que éste no fue su primer intento”, dijo el alguacil.
Según Simmons, alrededor de dos semanas antes Stanga se acercó a otra niña de 11 años y ella se lo contó a sus padres, maestra y directora.
“Ella sabía que algo estaba mal”, dijo Simmmons.
Afortunadamente la niña del video se encuentra a salvo con su familia en su casa, que se encuentra a menos de cien metros del lugar del incidente, y Simmons la aplaude por haber luchado y dado aviso a las autoridades rápidamente.
“Aplaudimos los esfuerzos y la resiliencia de la niña de 11 años”, dijo Simmons. “Hizo lo correcto, luchó y luchó y luchó y nunca se rindió. Y después fue directo con sus padres justo como debía, les contó lo que pasó y ellos contactaron a la Oficina del Alguacil del condado de Escambia.”
pmm