Expertos numismáticos y vendedores especializados de oro y plata coincidieron en que luego del robo cometido ayer en el Centro de Distribución de la Casa de Moneda, el mercado minorista de centenarios "está muy caliente".
"Hoy, por ejemplo, hace rato vino una viejita (SIC) con una moneda de 10 pesos, de oro, no se la compramos porque tras el robo la cosa está muy caliente. Además de que, el oro desde hace unos días, está muy caro", explicó uno de los vendedores consultados por MILENIO, que pidió anonimato.
Lo más redituable para vender centenarios es hacerlo por pieza, ya que cada uno de ellos contiene un "premio", es decir, un valor agregado en sí mismo. Este varía de acuerdo con los detalles del acuñado.
Los expertos consultados descartaron, en un panorama hipotético, que los ladrones de los centenarios busquen fundir las 567 piezas robadas para venderlas.
Sin embargo, en su opinión, si estos decidieran hacerlo, no encontrarían muchos obstáculos pues el oro es fácil de fundir, si se cuenta con el equipo adecuado.
El punto de fusión del oro es de mil 64 grados centígrados. Un soplete de butano, que se consigue fácilmente en ferreterías o en internet, alcanza una temperatura de 2 mil 500 grados centígrados.
El precio de los centenarios, de acuerdo con lo explicado, varía con el precio diario del oro.
En un ejercicio hecho por MILENIO, se constató que este miércoles el oro se cotiza en 946 pesos por gramo, por lo que, cada centenario tendría un precio de mercado de 35 mil 475 pesos, considerando que cada uno contiene 37.5 quilates de oro fino.
Los expertos en compra venta de metales preciosos consideraron que vender 567 centenarios resultará muy complicado porque, explicaron, no existe un mercado ávido de comprarlos en cantidades mayores a diez piezas.
En su diagnóstico, el robo perpetrado ayer por tres personas que ya son buscadas por las autoridades mexicanas, debió obedecer a un pedido específico de un comprador en el mercado negro.
RLO