Un tribunal en el Distrito de Columbia, Estados Unidos, desestimó un par de mociones ingresadas por Gerardo González Valencia, El Cuini, cuñado de Nemesio Oseguera Cervantes, El Mencho, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Tras el fallo emitido, sigue firme el inicio del juicio en contra de él y su hermano José, programado para el 23 de enero del 2023.
La autoridad alega que “el demandado no ha presentado pruebas suficientes” para refutar la presunción principal de que Uruguay no cumplió “con sus obligaciones en virtud del tratado y que la extradición” de la que fue objeto es completamente legal.
La petición de González Valencia pedía que en caso de que el juez no acceda a desestimar la acusación, al menos acepte “llevar a cabo una revisión a puerta cerrada de los procedimientos del gran jurado” contra él.
El pasado 7 de junio, González Valencia solicitó una audiencia oral para desestimar o, en su defecto, una revisión a puerta cerrada de algunas pruebas y procedimientos en su contra. Ya desde el pasado 8 de abril, abogados del acusado pidieron al tribunal desestimar la acusación por narcotráfico en su contra, aceptada por un jurado en abril del 2016, motivo por el cual fue detenido en Uruguay en junio del 2018 y extraditado a Estados Unidos dos años después.
Ese reclamo señala como “un fracaso del gobierno” la presentación de pruebas y dice que la declaración jurada de un agente de la Agencia de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) “sólo podría haber sido de mala fe” por lo cual es “atroz”, que el Departamento de Justicia (DOJ) ordenara su captura.
Ante el argumento de El Cuini, el gobierno respondió que la solicitud de extradición fue respaldada por un paquete de 51 páginas, que incluía, entre otros, copias de la acusación devuelta y orden de arresto emitida en este Juzgado, extractos de estatutos relevantes; y dos declaraciones juradas ejecutadas por un fiscal del Departamento de Justicia y un agente de la DEA, respectivamente.
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El gobierno insiste que, entre 2017 y 2020, tres tribunales uruguayos diferentes, hasta el más alto tribunal de Uruguay, la Corte Suprema de Justicia, examinaron las impugnaciones de los acusados a la solicitud del gobierno y cada uno autorizó su extradición.
No es la primera vez que algún intento judicial pretendido ya sea por José o por Gerardo González Valencia es rechazado por el juez Beryl A. Howell. En enero, el gobierno ingresó una solicitud para unir los casos de los hermanos, pero estos ingresaron una moción para impedirlo dando el juez finalmente la razón al gobierno.
En febrero, Gerardo pidió que retiraran de la acusación presuntos alias como “Lalo”, “Flaco”, “Silver”, “Silverio, "Eduardo" y "Laline", alegando que eran debidamente perjudiciales para él ya que no están respaldados por evidencia. Y podrían confundir al jurado. Un mes después el mismo acusado pidió excluir como prueba en su contra los tiburones con cocaína incautados por la Marina Armada de México en junio del 2016 en Mérida, Yucatán, insistiendo en las fallas en la cadena de custodia y sugiriendo que, en caso de ser cierto, el cargamento pertenecía a otro cartel.
Ya en diciembre había pedido ser dejado en libertad para llevar su proceso alegando que el tribunal del Distrito de Columbia no tenía competencia sobre él puesto que los Estados Unidos habían violado sus derechos al asegurar su extradición de Uruguay sin causa probable.
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