Raúl Julio Escobar Poblete, también conocido como "El Comandante Emilio" y ex guerrillero chileno, o Ramón Alberto Valencia como se hacía llamar en México, fue sentenciado a 60 años de prisión, más el pago de una multa de 320 mil pesos, además de sanciones para la reparación del daño que dan un total de más de 140 mil pesos, sumando en total 467 mil pesos tras ser declarado culpable del delito de secuestro a una mujer extranjera.
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Tras una audiencia de más de dos horas, Gloria Esther Hernández Valtierra Jueza del Tribunal de Enjuiciamiento, fue señalado como coautor del secuestro de la ciudadana extranjera Nancy Michelle Kendall en San Miguel de Allende, cometido en marzo de 2017.
Sin embargo, el equipo de abogados del acusado conformado por Alejandro Gutiérrez Morales y Adrián Vaca Godínez, al término de la audiencia condenatoria aseguraron que buscarán llevar el caso a una segunda instancia para que se reduzca la condena y se eliminen las sanciones.
"A nosotros nos hace falta que se nos allegue precisamente los detalles de la resolución, conociendo cada uno de los alcances o valores que se le haya podido dar a cada elemento aprobatorio de convicción en que se haya fundado el tribunal, podríamos considerar precisamente las alternativas, sin embargo como en toda la batalla o de carácter jurídico o litigio tenemos precisamente la oportunidad de considerar que esto es una primera instancia la opinión de una segunda instancia seguramente pudiera tener cabida", Alejandro Gutiérrez Morales, abogado de Escobar Poblete.
El sentenciado podría ser trasladado si así se decide nuevamente al centro de readaptación federal el CEFERESO número 12 ubicado en Ocampo, Guanajuato.
La audiencia inició de manera puntual, eran las dos de la tarde y se le vio llegar a "El Comandante Emilio" quien vestía una camisa color lila, anteojos color negro y cabello recortado, y se sentó junto a sus abogados, con quienes durante la audiencia interactuó en contadas ocasiones pues la mayoría del tiempo estuvo con la mirada fija hacia la juez quien daba una síntesis de las audiencias anteriores, pues el proceso desde la detención hasta el día de ayer duró más de dos años.
Uno de los primeros puntos abordados por la juez, fue que Raúl Julio Escobar Poblete, había reconocido en audiencias anteriores que su verdadera identidad era esa y no la de Ramón Alberto Valencia, como se hacía llamar en México, nombre que también venía en una identificación de docente de la universidad de Puebla.
Sobre las acusaciones y alegatos que había presentado anteriormente la defensa en donde afirmaban que al momento de la detención de Escobar Poblete se le había golpeado y dado malos tratos, la juez indicó que las investigaciones y el expediente reflejaba que el señalado no contaba con lesión alguna.
El Tribunal de enjuiciamiento determinó que la Fiscalía General del Estado (FGE) probó que Escobar Poblete facilitó la casa en la que estuvo secuestrada la mujer de origen franco-estadunidense y participó en la privación ilegal de la libertad, además de que dio seguimiento a la entrega de un último paquete para conseguir el pago de un millón de dólares de rescate y alertó a sus cómplices para que liberaran a la víctima cuando fue detenido en una gasolinera de San Miguel, el 30 de mayo del 2017.
Ese día, el chileno había pedido a un taxista llevar un "paquete" que según las entrevistas de los testigos, el extranjero había asegurado que en el interior del mismo habían medicamentos, sin embargo en el interior del envoltorio estaba un dedo cercenado de la víctima de la tercera edad además de dos cartas donde se solicitaba el pago del rescate.
Tras la entrega del paquete al taxista, lo siguió para verificar que la encomienda fuera cumplida, sin embargo el taxista al momento de percatarse que era perseguido decidió llamar a la policía y esperar a las autoridades en una gasolinera, momentos después se dio la detención del extranjero.
Las investigaciones probaron que Raúl Julio Escobar Poblete secuestró por más de dos meses, del 13 de marzo hasta el día 30 de mayo del 2017 a Michelle Kendall, una mujer de la tercera edad de nacionalidad franco- americana, a quién cercenó uno de sus dedos.
Antes de dictar sentencia, la Jueza resaltó que la víctima al igual que su esposo Alain Teissier tenían un proyecto de vida en el país mexicano, el cual abandonaron tras irse de México a consecuencia del secuestro.
También la juez, Gloria Esther Hernández Valtierra dijo que para tomar una decisión el Tribunal de Enjuiciamiento no tomó en cuenta los antecedentes de Escobar en Chile, como ex guerrillero integrante del Frente Patriótico Manuel Rodríguez y sus actividades en ese país.
Al final de juicio, "El comandante Emilio", se levantó y volteo hacia la audiencia con una sonrisa en el rostro.