La reforma que impulsó el gobierno federal con la cual quitó la regulación asimétrica a Petróleos Mexicanos (Pemex) para que tuviera predominancia frente a sus competidores, fue declarada inconstitucional por la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
La sentencia tiene efectos generales y protege a todas las empresas de dicho sector, además, ordena que prevalezcan las medidas impuestas a Pemex desde 2014, mismas que impiden que esté por encima de la competencia.
Hoy, los ministros Javier Laynez Potisek, Luis María Aguilar Morales y Alberto Pérez Dayán, confirmaron el primer amparo otorgado que impugnó el decreto por el que se reformó el artículo 13 Transitorio de la Ley de Hidrocarburos, publicado en el Diario Oficial de la Federación el 19 de mayo de 2021, entre otros actos.
Las ministras Loretta Ortiz Ahfl y Yasmín Esquivel Mossa votaron contra la propuesta del ministro Laynez Potisek.
La mayoría coincidió que, el Congreso de la Unión invadió facultades de la Comisión Reguladora de Energía (CRE).
Cabe mencionar que, en 2021, al día siguiente de la entrada en vigor de la reforma, los jueces en materia Administrativa, Especializados en Competencia Económica, Rodrigo de la Peza López Figueroa y Juan Pablo Gómez Fierro, frenaron su aplicación al conceder suspensiones y después amparos.
Los juzgadores estimaron que con la eliminación repentina de la regulación asimétrica se corre el riesgo de que las empresas productivas del Estado establezcan tarifas u otras condiciones excesivas, incluso, en los mercados en los que aún tiene poder dominante, lo que también podría dar lugar al desplazamiento de sus competidores.
Además de generar incertidumbre jurídica para los permisionarios, podrían ocasionar una reducción considerable del número de participantes en los mercados de hidrocarburos, petrolíferos y petroquímicos, otorgando poder de mercado a Pemex y reduciendo las condiciones de oferta.
Hecho que podría resultar en el incremento de precios de los bienes y servicios ofrecidos a lo largo de la cadena de valor de estos mercados, con el correspondiente impacto negativo para los consumidores finales, explicaron a través de sus resoluciones.
“Al eliminar la facultad originaria de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) para sujetar a Pemex y a sus organismos subsidiarios a principios de regulación asimétrica y al ordenar que se dejen sin efectos todas las disposiciones que hayan sido emitidas bajo principio de asimetría, las normas podrían afectar la capacidad de este órgano para regular al sector, pues acotan sus atribuciones para regular a ciertos participantes y limitan las facultades discrecionales con que cuenta para elegir los medios y el tipo de política regulatoria que se requieren para alcanzar los fines constitucionales que le fueron encomendados, específicamente, para garantizar el desarrollo eficiente del sector de hidrocarburos”, manifestaron.
También advirtieron que, si en algún momento Pemex y sus organismos subsidiarios aumentaban su poder dominante en los mercados de hidrocarburos, petrolíferos y petroquímicos, al grado de dañar la competencia en dichos mercados, la CRE no podría imponer medidas para corregir ese desequilibrio, pese a que dicho órgano le corresponde elegir los medios y el tipo de política regulatoria.
VRM