Familias presuntamente defraudadas por Francisco Jiménez Montoya y otro grupo de vendedores, apoderados legales que se ampararon en la asociación civil “Apoyo a una Vida Mejor”, se presentaron este domingo en las oficinas de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) para denunciar la venta ilegal de lotes en un predio ubicado sobre la Avenida Mexiquense, a espaldas del Conalep de Coacalco, en donde desde septiembre pasado se inició la comercialización de lotes y en noviembre la FGJEM colocó sellos para asegurar el sitio.
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Los afectados denunciaron que desde el miércoles pasado acudieron al centro de justicia de Coacalco para presentar la demanda colectiva que es de más de 40 familias, pero las autoridades ministeriales se negaron a iniciarla, hasta que se presentaran todos los defraudados para ratificar, por lo que hoy acudieron a hacerlo.
Recordaron que cuando inició la venta de los predios, los vendedores colocaban una sombrilla al interior del predio, y solicitaban a los interesados un enganche que fue mínimo de 35 mil pesos, así como la firma de pagarés para que fueran pagando su lote en mensualidades hasta cubrir cantidades de más de 360 mil pesos por un espacio de 120 metros cuadrados, “hubo personas que liquidaron la totalidad del costo, y quienes entregaron más dinero, porque solicitaron más de un espacio”, dijeron.
Explicaron también que existía una oficina de la asociación civil “Apoyo a una Vida Mejor”, que les vendió, misma que ubicaron en la calle Bosquecitos número 42 en el fraccionamiento Bosques del Valle, en donde los defraudadores les mostraron planos, permisos otorgados por autoridades del Ayuntamiento de Coacalco, del área de desarrollo urbano, así como otros documentos que les dieron confianza, además de ofrecerles apoyo para tramitar en paquete la introducción de los servicios como agua, drenaje, y pago de predio.
“Cada domingo efectuábamos junta de compradores en el interior del terreno, hasta que el pasado 4 de Noviembre, nos encontramos con la sorpresa de que la FGJEM colocó sellos en la entrada al terreno, para declarar el sitio como un inmueble asegurado. En el ayuntamiento nos han dicho que se debe a que no contaban con los permisos para lotificarlo, y una de las vendedoras, Nancy Natalia "N" nos advirtió que fue porque el dueño recibió una propuesta mejor de venta”, declararon Fabiola Cervantes y Rubén Romero.
Entre las personas que se identificaron como apoderados legales del propietario, están Carlos Alberto Alcántara Peña y Ernesto Jiménez Severiano, y como contador Edgar Fermín Ruiz Hernández.
LC