Un tiradero clandestino de ataúdes fue descubierto recientemente por vecinos de la zona aledaña al Camino Real a Alpuyeca, que conecta la capital poblana con dicha comunidad, así como con la Academia Estatal de Policía y Chachapa.
En el lugar se pueden apreciar los restos de al menos 5 cajas mortuorias de madera, ornamentadas algunas con tela de satín, listones y restos de vidrio que formaron parte de su estructura.
Como parte de la macabra escena, se pudo registrar que algunas de las piezas presentan manchas de sangre y otros fluidos.
En la zona se registra la presencia de pastores que llevan a sus cabras a pastar, los vecinos de la zona también tienen que pasar muy cerca de los ataúdes para acceder a sus viviendas. Sin embargo, comentan que no se ha registrado la presencia de ninguna autoridad que pueda realizar el retiro de este material, considerado peligroso.
AFM