La activista defensora de derechos humanos, Kenia Hernández, volvió a ser detenida momentos después de haber salido del Centro Penitenciario y de Reinserción Social de Almoloya de Juárez, en el Estado de México. Esta nueva orden de aprehensión fue girada por la autoridad federal tras acusarla del delito de daño a las vías de comunicación y en esta ocasión fue trasladada a un penal de Acapulco, Guerrero.
Antonio Lara Duque, fundador del Centro de Derechos Humanos Zeferino Ladrillero, indicó por redes sociales que cuatro horas después de haber obtenido su libertad, la Fiscalía General de la República (FGR) cumplimentó una nueva orden de aprehensión en contra de la activista por un supuesto delito de daños a las vías de comunicación. "José Miguel López Rodríguez, juez de distrito especializado en el sistema penal acusatorio, en el estado de Guerrero, giró en la causa penal 322/2020 una nueva orden de aprehensión, ahora por el supuesto delito de ataques a las vías de comunicación", indicó.
Debido a esto, Kenia fue trasladada del Estado de México a un penal de la entidad guerrerense; sin embargo, Lara Duque pidió a todos aquellos que han seguido la lucha social por defensa de los derechos humanos continuar exigiendo justicia, pues afirmó que se trata de una persecución orquestada por empresas concesionarias y gobierno estatal y federal.
"Pedimos mantener la solidaridad y atención a Kenia Inés, porque una campaña de criminalización y señalamiento en su contra impulsada por empresas concesionarias y gobiernos que insisten en mantenerla en prisión a como de lugar".
Esta es la tercera orden de aprehensión en contra de la activista indígena de Guerrero en lo que va del año; dos de ellas de ellas fueron por robo con violencia en el Estado de México y esta última girada por un juez federal.
MMCF