De enero a junio de este año, el Estado de México registró un incremento de 14.20 por ciento, comparado con el primer semestre de 2022, por robo de combustible en ductos de Pemex, principalmente en municipios de la zona oriente y norte.
De acuerdo con el último informe realizado por el Instituto para la Gestión, Administración y Vinculación Municipal (Igavim) del Observatorio Ciudadano de Puebla, publicado durante este mes, a nivel nacional se identificaron 6 mil 6 tomas clandestinas en ductos petrolíferos o de hidrocarburo. En el país, el Estado de México se ubicó como el tercer lugar con un registro de 925 tomas por detrás de Hidalgo que registró 2 mil 160 y Jalisco con 976, pero por delante de Tamaulipas que tuvo 432 y Guanajuato 252.
Daño al sector en general
En este sentido, el presidente de la Asociación de Distribuidores de Gasolinas y Lubricantes (Adigal) en el Valle de Toluca, Jorge Luis Pedraza Navarrete, refirió que, a la fecha, el robo de combustible se mantiene en la zona de Acambay, Polotitlán y otros municipios limítrofes con Hidalgo, por donde pasa el ducto de Pemex, aunque la entidad no tiene las mismas complejidades.
Lamentablemente en algunos casos, refirió, el combustible sustraído ilegalmente de los ductos se ha introducido en el mercado formal afectando al sector en general. Si bien el robo es un problema que afecta directamente a Pemex, los empresarios del ramo están preocupados porque cuando ese combustible llega al mercado formal, de inmediato ven problemas de precios porque se ofrece más barato.
“Es un delito que quebranta al país cuando se comercializa en el mercado informal en tambos o bidones; entra en el mercado con los transportistas, pero es peor cuando llega a las estaciones de servicio, donde se pagan impuestos y hay mucha competencia”, señaló el titular, Jorge Luis Pedraza Navarrete.
Diferencia de precio
En el Valle de Toluca, por ejemplo, el precio entre gasolineras es uniforme y la diferencia por litro ronda los 40 centavos como máximo, “sin embargo, en la zona norte de la entidad mexiquense hay estaciones de servicio con diferencias de hasta un peso, lo cual es muchísimo”.
“Eso es salvaje, no es un tema de mercado, en el norte del país sí hay diferencias de hasta 1.40 pesos por la cercanía que hay con la frontera con Estados Unidos y porque el combustible viene de un trasiego que no está pagando impuestos, es decir, llega como acetona o aditivo”, manifestó el presidente de la asociación.
A estas alturas, explicó el representante de Adigal, es muy complicado que haya diferencias de más de un peso en el litro de gasolina entre estaciones de servicio, porque los márgenes de utilidad no alcanzan a cubrir los gastos respectivos.
En el Valle de Toluca el combustible ya no llega por ducto sino en convoy de 50 o 60 pipas, luego de que el gobierno federal los cerrara definitivamente en 2019, lo cual ha generado que los gasolineros locales estén 10 centavos arriba en el costo por litro.
Hasta el momento los 65 municipios que monitorea Adigal no han recuperado los márgenes de utilidad, “seguimos siendo de las zonas del país con los peores márgenes, andamos rondando los 60 centavos”, finalizó.
Incidencia municipal
De acuerdo con el estudio, Jilotepec encabeza el ranking estatal interno de la lista de 100 municipios con más tomas del país, contabilizando 146, y se ubica en el décimo lugar, seguido de Soyaniquilpan (114) y Aculco (106), que están en el lugar 14 y 15. Ixtlahuaca (73), Otumba (63) y Polotitlán (60), se ubican en los lugares 30, 31 y 32 respectivamente.
Otros que también están en el registro nacional son Zumpango con 54, Teoloyucan (50), Huehuetoca (44), Axapusco (41), Acambay (40), Atlacomulco (26), Almoloya de Juárez (23), Jocotitlán (20), Acolman y Coyotepec (14 cada uno), además de Apaxco (8). En el país, Pemex identificó en el primer semestre del año una toma cada 43 minutos 45 segundos; mientras en el Estado de México lo hizo cada 4 horas con 44 minutos.