De acuerdo con los resultados de la segunda edición de la “Encuesta Nacional sobre la Población Privada de la libertad (EPPOL) 2021 del Inegi, a nivel nacional hay 220 mil 500 personas recluidas en 203 centros penitenciarios, donde el Estado de México ocupa el primer lugar en ocupación con 34 mil 100 reclusos, de los cuales 2 mil 100 personas son mujeres y 32 mil son hombres.
El delito de robo es la principal causa por la que una persona está privada de su libertad, especialmente, por el robo de automóviles y de casa-habitación, seguido del delito de posesión de droga en 1 de cada 5 casos de mujeres.
En conferencia de prensa Julio Santaella, presidente del Consejo Directivo del Inegi, señaló que la encuesta se realizó entre junio y julio pasados, y precisó que 72 por ciento de los casos los reclusos cuentan con sentencia dictada, un incremento de 2 por ciento con respecto al censo de 2016.
Delitos en penales
Uno de los datos relevantes que arrojó el estudio es el crecimiento del 7 por ciento en los hechos de corrupción al interior de los centros penitenciarios, al pasar de 10.8 a 17.2 por ciento, donde destaca que las personas puedan tener mejores condiciones en su periodo de encierro. En el Estado de México 57.9 por ciento de las personas recluidas han sido víctimas de extorsión.
“26 por ciento de las personas se sienten inseguras dentro del centro de reclusión, 88 por ciento ha sufrido robo de pertenencias y 12 por ciento ha pagado por algún servicio o un mejor espacio de alojamiento”.
Baja reincidencia pero más personas de involucran en delitos
Los niveles de reincidencia han ido a la baja en los últimos 5 años al pasar de 26 en 2016 a 22 por ciento, lo cual no sólo tiene que ver con que las personas no caigan nuevamente en la comisión de delitos sino que hay un nuevo grupo de personas involucrándose en la comisión de hechos ilícitos. También más de 50 por ciento de las personas que han estado presas ven que difícilmente se colocarán en programas laborales.
- Explicó que en el contexto de las personas que hoy se encuentran privadas de la libertad, en 21 por ciento de los casos abusaban del consumo del alcohol antes de cumplir 15 años, 43 por ciento vivieron con uno o ninguno de sus padres y 84.7 por ciento realizó un trabajo y oficio legal a penas una semana antes de su detención.
Población penitenciaria joven
De acuerdo con la encuesta la población penitenciaria es joven, 62 por ciento están entre los 18 y 39 años, donde 7 de cada 10 mujeres están en esta etapa; mientras que 1 de cada 4 es hombre entre los 18 y 24 años y 1 de cada 3 es mujer.
La vida penitenciaria cambia la vida de las personas, pues 8 de cada 10 personas que están en una cárcel tuvieron dependientes económicos antes de su detención y en 55 por ciento de los casos con hijos menores los abuelos se hicieron cargo de ellos.
Cabe mencionar que 1 de cada 3 personas que están en los centros penitenciarios no tienen sentencia y una cuarta parte de ellos ha esperado más de dos años para recibirla. También 46.1 por ciento de las mujeres están siendo procesadas, es decir, la justicia les llega más tarde.
5.8 por ciento tiene hijos menores de edad viviendo en el centro penitenciario, de los cuales todos nacieron ahí lo que implica apoyos institucionales. La población inscrita en programas educativos bajó de 30 al 22 por ciento y una de las escusas es que no encontraron tiempo.
KVS