Una pistola calibre .38, con mango incrustado con múltiples diamantes y las iniciales “JGL”es una de las evidencias que mostró la Fiscalía de Estados Unidos contra Joaquín El Chapo Guzmán durante su juicio.
El pasado lunes, la Fiscalía mostró al jurado una fotografía del arma atribuida al líder del cártel de Sinaloa.
En el juicio, Jesús El Rey Zambada, testigo clave en el juicio del narcotraficante, dijo que El Chapo era generalmente protegido por 30 a 40 pistoleros que usaban rifles tipo AK-47 y hasta bazucas.
Jesús Zambada, quien trabajó junto a Guzmán y le vendió cocaína durante cuatro años, declaró que la desconfianza entre El Chapo y Carrillo Fuentes nació luego de que el segundo no estrechó la mano de Guzmán Loera.
Al año siguiente el también narcotraficante Julio Beltrán, del cártel de Sinaloa, acabó con la cabeza casi separada del cuerpo debido a los numerosos impactos de bala que recibió, dijo Zambada.
El testigo dijo que El Chapo y el otro líder del cártel, Ismael El Mayo Zambada, querían matarlo porque Beltrán no respetaba órdenes.
El lunes fue el tercer día que Zambada testificó, respondiendo preguntas de la fiscalía, que mostró fotos de narcos rivales y de miembros del cártel de Sinaloa y una imagen de una pistola con diamantes que supuestamente pertenecía a El Chapo.
jbh