Cada 18 de noviembre México recuerda el retorno triunfal del Escuadrón 201 tras su participación en los frentes del Pacífico de la Segunda Guerra Mundial, por ello se realizó un homenaje en el Memorial a las Águilas Caídas, ubicado en la explanada del Museo Militar de Aviación, en Santa Lucía, Estado de México.
Una hazaña que —según el general de División Piloto Aviador Diplomado de Estado Mayor Aéreo, Bertín Hernández Mercado, comandante de la Fuerza Aérea Mexicana— sirve de ejemplo para las futuras generaciones.
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“El sacrificio de los que perdieron la vida en el deber es un gran ejemplo para las presentes y futuras generaciones. [...] El día de hoy nuestra nación es una de las pocas en el mundo que tiene la gracia de convivir y aplaudir a sus combatientes por ser los únicos militares mexicanos con experiencia en una conflagración internacional”, dijo en su mensaje
Este día se recuerda como la parte final de la participación del Escuadrón 201, que defendió el honor nacional en la Segunda Guerra Mundial como consecuencia de los ataques de submarinos alemanes a buques petroleros mexicanos en mayo de 1942.
A su llegada a México, fueron recibidos por el entonces presidente Manuel Ávila Camacho, a quien le fue entregada de manos del coronel Antonio Cárdenas Rodríguez, comandante de la fuerza aérea expedicionaria, la bandera mexicana que juraron proteger antes de partir.
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Esposa de combatiente rememora cómo fue su llegada
En entrevista con MILENIO, Juana Hernández Espíndola, viuda del mayor Armando Rodríguez, perteneciente al Escuadrón 201, recuerda este día con orgullo, como el 18 de noviembre de 1945.
“Unas lloraban, otros reían porque cinco no llegaron entonces hubo de todo, hubo lágrimas de gusto, hubo todo y parece que lo estoy viviendo a lo que me platicaba mi esposo. [...] Es una historia que está en papeles, y yo tengo mucha memoria escrita, ya viejos los papeles pero sigo viviendo yo; lo sigo viendo como cuando llegaron, cuando les pusieron las medallas”, recuerda.
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