Un estudios sobre la inseguridad en el transporte público de pasajeros realizado por la Universidad de Stanford, señaló que en los municipios de Nicolás Romero, Tlalnepantla, Ecatepec, Naucalpan, Chimalhuacán y Valle de Chalco, más de 80 por ciento de los residentes sienten que sus trayectos son inseguros.
Estos territorios también son de alta marginación socioeconómica, por lo que el costo del crimen recae sobre los más pobres, que son además quienes menos posibilidades tienen de mitigar dicha situación haciendo uso del transporte privado.
La investigación denominada “La Victimización en el Transporte en la Ciudad de México y la Zona Metropolitana”, refiere que 68 por ciento de los encuestados dijeron que utilizan el microbús, pesero o combi, seguido del Metro, 60 por ciento; taxi, 31; Metrobús o mexibús, 27; así como autobús, 19 por ciento.
El automóvil propio es utilizado por 14 por ciento en forma cotidiana y los servicios de transporte a través de aplicaciones por 12 por ciento.
El estudio realizado indica que existe una correspondencia entre trayectos inseguros y el tiempo que les toma a las personas trasladarse por la Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM), sobre todo entre semana, pues una persona que emplea más de dos horas para llegar a su destino principal tiene 70 por ciento más de probabilidades en experimentar trayectos inestables y la probabilidad se reduce a 41 puntos porcentuales para quienes tardan menos de 15 minutos en arribar a su destino y las mujeres por lo general reportan una tendencia mayor de miedo a ser víctimas del crimen.
El transporte más inseguro es el microbús, dado que 90 por ciento de las pobladoras y 85 por ciento de los hombres temen que la delincuencia los alcance si se suben.
Los autobuses regulares son el segundo medio más temido, ya que 86 por ciento de las ciudadanas y 79 por ciento de los varones consideran que es probable, o muy probable, que si utilizan este medio puedan ser asaltados.
Se hizo notar que a 66 por ciento de ellas le inquieta pasar una mala experiencia en el Metro, versus 53 por ciento de los caballeros. Las aplicaciones (Uber, Cabify, Didi) son vistas como las más seguras, dado que 21 por ciento dijo que era improbable ser víctima del delito y 33 por ciento poco probable.
Los taxis son considerados como un medio de transporte inseguro, ya que más de 60 por ciento respondieron que era muy probable o algo probable padecer por el hampa en este transporte. La encuesta no distinguió entre taxis de sitio y calle, por lo que un estudio futuro deberá explorar las diferencias de ambos tipos.
LC