En Estados Unidos es más fácil comprar lanzagranadas, fusiles o un Barrett que un jarabe para la tos, que llega a contener dexedrina, una de varias sustancias restringidas en ese país actualmente, sobre todo fentanilo, que solo es posible adquirir con receta médica ante la gran demanda entre adictos”.
La analogía es del comisionado Nacional de Seguridad, Renato Sales, quien ejemplifica así la creciente violencia que enfrenta México de manera colateral, luego de las restricciones que impuso EU para comprar medicamentos que contienen este tipo de precursores, cuyo consumo ha ido en aumento al punto que ha sido declarado epidemia.
En entrevista con MILENIO, explica que el cambio de la política de salud estadunidense ha impactado de manera directa en el creciente número de homicidios relacionados con el crimen organizado en México. Los narcos “exportan precursores y reciben dinero y armas”.
Señala que cárteles, principalmente los de Jalisco Nueva Generación y del Pacífico, así como las escisiones de Santa Rosa de Lima y La Nueva Plaza, se disputan el lucrativo mercado negro que se abrió con la prohibición.
“Es en buena medida, la causa de la violencia, del gran número de homicidios relacionados con delincuencia organizada en varios estados, a lo que se suma el aumento de armas que hay en las calles, que los delincuentes adquieren con relativa facilidad, en gran parte este intercambio de armas por droga, en la actualidad de precursores, como fentanilo”.
Dijo que un kilo de fentanilo puro alcanza un precio de un millón de dólares.
Pero si es mezclado con otras sustancias la ganancia para narcotraficantes llega hasta 20 millones de dólares, según estimaciones del informe Counterfeit prescription pills containing fentanyls: a global threat, de la DEA.
Sales destacó que hay constante intercambio de reportes de inteligencia con autoridades de EU para combatir el tráfico de fentanilo y dice que el gobierno de México ha realizado esfuerzos sin precedentes para atacar el problema que afecta a ambos países.
“El gobierno mexicano mantiene en la actualidad estrecha colaboración e intercambio de inteligencia con la administración de EU para interceptar cargamentos y evitar su tráfico, así como para desmantelar a las organizaciones que se dedican a esta actividad, es un tema que nos afecta a todos”.
La sustancia es de alta toxicidad, ya que dos miligramos pueden ser letales. El fentanilo fabricado ilícitamente es 50 veces más potente que la heroína, por lo que se necesita una menor dosis para alcanzar su efecto.
Por esto, los cárteles lo utilizan para potenciar el efecto de otras drogas al ser mezclado. En los últimos años el opioide tiene gran demanda en el mercado de consumo de EU, también Canadá, por lo que existen alertas sobre su introducción ilegal.
“En EU, durante 2016, hubo 64 mil muertes por sobredosis; nosotros tuvimos 23 mil 500 por enfrentamiento entre distintas bandas, es decir, es nuestro índice de homicidios, 23 mil 500 contra 64 mil en EU por sobredosis, de las cuales, casi 70 por ciento fue por opioides, una epidemia para ellos”.
Refiere que EU cambió su política sanitaria y dejó de vender libremente oxicodina, dexedrina, tamadol y algunos otros opioides como fentanilo: “Resulta que México es productor de amapola, goma de opio de donde se obtiene la morfina, heroína y los opioides, oxicodina, tamadol, y recibimos vía Asia el fentanilo.
“La violencia que ha crecido en algunas zonas de México, particularmente, es en los estados con cruces fronterizos y los puertos, así como las regiones donde se cultiva la amapola, que dicho sea de paso, en los tres tratados internacionales que hay, la amapola puede cultivarse legalmente para usos médicos”, dijo.