Diana Carolina Raygoza Montes tenía un sueño: hacer justicia y evitar atropellos. Fue por eso que se inscribió en la carrera de Derecho en la Universidad Autónoma de Nayarit, pero el sueño terminó el domingo 24 de mayo, cuando 39 puñaladas en el tórax, cráneo, abdomen y cuello terminaron con su vida.
Hoy el recuerdo de “Caro”, como le llamaban sus amigos, es el estandarte de sus compañeros, quienes claman su ideal de justicia para su caso.
La joven de 21 años fue asesinada al interior de su vivienda de la colonia Morelos, en el municipio de Tepic, de acuerdo a las primeras investigaciones de médicos legistas y del área de criminología de la Fiscalía General de Justicia estatal.
Caro cursaba el tercer año de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Nayarit y su asesinato fue tan significativo en la entidad que varias personas colocaron fotografías en la plaza Bicentenario de Tepic frente a Palacio de Gobierno. Es el séptimo feminicidio en lo que va 2020 en el estado.
Sus compañeros lamentaron lo ocurrido. A Diana Carolina, admitieron, le fue borrado su sueño, su ilusión de impartir justicia, de defender a los más necesitados. Quería ser abogada dedicada a causas sociales.
“No hay palabras que puedan describir el dolor tan grande que siento en este momento, la mujer que me enseñó a ser mejor persona y ver siempre lo bueno de la vida. No pararemos hasta hacer justicia”, escribió Alberto Ángel Martínez, compañero de la facultad.
Un ex compañero de secundaria de nombre Marcel lamentó el asesinato: “hoy me duele que no estés aquí, tenías toda una vida por delante y te la arrebataron”.
El cuerpo de la joven fue hallado en la recámara principal de una vivienda de una planta y unos ocho metros de frente, con cochera y cancel metálico. El asesinato se registró entre las 07:00 y 12:00 horas del domingo 24 de mayo.
Según, la investigación, en la parte trasera de la vivienda, en su patio, cuenta con tres perros Pastos Alemán, lo que descarta la posibilidad de que el agresor hubiera escalado las bardas o violentado las ventanas.
La fiscalía descartó el robo al inmueble y, hasta el momento, no se han encontrado indicios de violencia sexual.
“Se tienen las primeras investigaciones que arrojan que la joven Diana falleció derivado de heridas con arma blanca, punzocortante en abdomen y tórax. No hay indicios de violación de chapas, ventanas. La joven fue localizada en la recámara principal con heridas y sobre la pared del dormitorio unas letras SF con sangre”, reveló el Fiscal de Justicia, Petronilo Díaz Ponce.
Hoy, en las aulas de la Universidad Autónoma de Nayarit ya no estará Caro la futura abogada, no habrá más debates, reuniones de grupos. Sus amigos, familiares y grupos sociales buscan esclarecer su asesinato, que se haga justicia.
bgpa