El 60 por ciento del fentanilo que inundó las calles de Estados Unidos, y provocó la muerte de más de 70 mil personas en 2021, entró por los tres puntos de ingreso de Baja California.
Las garitas de Otay, San Isidro y Calexico representan apenas el uno por ciento de los 300 accesos aduanales que existen para ingresar al país vecino, convirtiendo a San Diego como principal puerta de acceso del opioide sintético, donde inicia la estela de muerte por sobredosis.
En entrevista con MILENIO, la Fiscal de Distrito de San Diego, Summer Sthepan, reconoció que el año pasado (y este se perfila para repetir) el fentanilo fue la causa número uno de muertes entre la población norteamericana por arriba de los asesinatos por armas de fuego, accidentes automovilísticos y enfermedades como covid-19 y cáncer.
Por ello, en su distrito han endurecido las penas contra los traficantes de la droga sintética, al grado de que en lo que va del año han presentado cargos contra siete traficantes por el “asesinato” de jóvenes que murieron a causa de la droga.
También modificaron sus leyes para sentenciar a cadena perpetua a los dealers que en tres ocasiones fueron arrestados por el tráfico de fentanilo.
“El fentanilo está matando a más personas en los Estados Unidos que cualquier otra causa, es abrumador, más que los accidentes automovilísticos, las armas, más que el cáncer, la diabetes o el covid”.
Las fuertes medidas se deben a que, en los últimos dos años, San Diego se ha convertido en la principal entrada de la droga, ante la laxitud de las autoridades mexicanas.
“Tenemos tres puertos de entrada en San Diego y el 60 por ciento del fentanilo que se consume llega en vehículos desde México en nuestros puertos de entrada. Todo este producto se está fabricando en México. Sabemos que se está fabricando sin cuidado, lo que significa que dos miligramos pueden matar a una persona, pero se está fabricando sin importar la cantidad que contiene y esencialmente solo para generar ganancias para los cárteles”, dijo.
Las ganancias
De acuerdo con el Centro Internacional de Investigación y Análisis Contra el Narcotráfico Marítimo, en su más reciente reporte del fentanilo, un kilo de este opioide sintético se fabrica en dos horas y genera ganancias por 195 mil dólares.
Contrasta con la elaboración de cocaína, que tarda hasta 12 meses con réditos de 11 mil 500 dólares, y la heroína, que tiene un tiempo de elaboración de cuatro meses y réditos por 15 mil dólares.
Estas fuertes ganancias y el fácil cruce a Estados Unidos ha provocado una guerra de mercado entre los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación.
El reporte de la agencia marítima de inteligencia revela que Jalisco, Sinaloa y Sonora son los principales puntos de partida del trasiego de este opioide sintético.
El Cártel de Sinaloa controla los accesos terrestres a Estados Unidos de California, Arizona y Nuevo México; mientras que Jalisco Nueva Generación los aéreos a California (San Diego), Nevada, Washington, Virginia y Kentucky.
La agencia de seguridad internacional marítima reveló que más del 75 por ciento del fentanilo y las pastillas falsas cruzan la frontera Tijuana-San Diego en carros de pasajeros, camiones contenedores o las llamadas “mulas”.
Otra parte de la droga ilícita es traficada a través del Océano Pacífico y el Golfo de California, mediante el empleo de “Lanchas Go Fast”, con destino a los puertos de Tijuana y San Diego.
“México se ha convertido en el lugar número uno en el que se fabrica fentanilo y debido a que San Diego tiene algunos de los puertos de entrada más grandes, llega a través de San Diego. Por eso nos hemos convertido en la zona cero para luchar contra el fentanilo”, afirmó la fiscal Sthepan.
La guerra contra el fentanilo emprendida en San Diego tuvo como origen el fácil acceso que han tenido los menores de edad a la droga, una de sus presentaciones más populares es la rainbow, que son pastillas de colores con dosis letales.
Por ello, los sheriffs de San Diego hicieron un llamado a los padres de familia para que cuiden los dulces que reciben y consumen sus hijos en la víspera de Halloween.
“El lado de la prevención está en la educación, porque nuestros estudiantes, nuestros hijos, no se dan cuenta de que es tan mortal. El año pasado perdimos a 12 niños por el fentanilo, uno de tan sólo 13 años, y es por eso que este es un enfoque y una prioridad”, detalló.
Tanto su fiscalía como los sheriffs han puesto mayor énfasis a las actividades de los dealers en las redes sociales, toda vez que gran parte de la compra-venta y el delivery se hace en aplicaciones como Facebook y Snapchat.
“Lo que estamos haciendo al respecto es que estamos tratando de atacar el problema desde su origen, pero el problema es que los niños están en sus habitaciones comprando estas cosas en Internet. Estamos tratando de aprobar algunas leyes para que internet tenga más controles porque saben que tienen algoritmos y pueden saber que algo está pasando, pero desafortunadamente es demasiado rentable”, afirmó.
La fiscal de San Diego confió en que las medidas que están tomando en su condado para penar a los dealers, desalentar el delivery en redes sociales e informar y dotar de narcan (el medicamento que puede salvar vidas en caso de intoxicación) tanto a autoridades como familias para que disminuya el consumo de fentanilo.
“Seguiremos trabajando con el fiscal de los Estados Unidos porque las leyes federales son muy estrictas con el fentanilo en comparación con las leyes estatales. Y también con la DEA para seguir abatiendo su proliferación en las calles”, dijo.
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