El abogado Marco Antonio del Toro confirmó que el ex gobernador de Veracruz, Javier Duarte, negoció su entrega ante las autoridades, por presión del gobierno de Enrique Peña Nieto a cambio de no molestar a su familia.
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En una carta enviada a medios de comunicación, el abogado destacó que está autorizado para “confirmar categóricamente” la revelación de Duarte.
“La verdad es que tuvo que sucumbir ante extraordinarias presiones para que se redujeran las ilegales presiones a su familia. Ello, a fin de satisfacer exigencias, que de no “aceptarse”, hubieren entonces acarreado consecuencias que ningún padre de familia podría conocer y no sacrificarse para evitarlas", dijo.
“A partir de ese momento decidió defenderse ante las autoridades judiciales -en lo que coincidí ya que era evidente la fragilidad de las imputaciones-, sin contar en ese momento con que surgirían más dificultades a propósito de nuevas presiones de funcionarios gubernamentales y otros, que se imprimieron en su contra”, agregó.
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Aseguró que el video del ex mandatario estatal que se grabó el 15 de abril del 2017, antes de que fuera “supuestamente detenido” en Guatemala, no es la única prueba.
“De hecho, ese video no es el único medio de prueba que acredita las ilegales presiones -que como dije ocurrieron antes y también después de que se llevara a cabo la pseudo detención en Guatemala-. Existe evidencia documental e informática, por llamarle de algún modo, que así lo acredita, la que por ahora se encuentra sujeta al secreto profesional y que está debidamente resguardada”, dijo.
“Confirmo también que es cierto lo que Javier Duarte les manifestó a ustedes en el sentido de que fui yo quien le pidió hiciera dicha videograbación en Guatemala”, añadió.
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“Lo confirmo, ya que le indiqué entonces que debía generar una prueba fehaciente de la existencia de presiones ilegales y probablemente delictivas, que afectaban a su familia, incluyendo sus hijos, por parte de las autoridades federales involucradas en aquel momento. Y es que entonces no era posible hacerlas públicas o siquiera pensar en denunciarlas, por razones obvias. Hoy no me corresponde hacerlo”, expresó.
Del Toro resaltó que dejó la defensa debido a presiones ilegales que resintió Javier Duarte.
“Se le exigió mi salida en tanto la defensa técnica planteada no cabía en el plan que se orquestó en su contra para incriminarlo, haciendo de él un chivo expiatorio y enemigo”, comentó.
El 9 de julio, Javier Duarte aseguró que pactó con mandos del gobierno de Enrique Peña Nieto para entregarse a las autoridades, a cambio de que no molestaran a su familia.
De acuerdo con el ex mandatario, el acuerdo fue pactado con autoridades del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen), de la Secretaría de Gobernación (Segob) y de la Procuraduría General de la República (PGR).
FLC