Juez decide no vincular a proceso a detenidas en la CNDH en 2022; reconocen criminalización en el caso

Las activistas agradecieron la solidaridad de todos quiénes las apoyaron para en un primer momento lograr que llevarán su proceso en libertad,

Karla y Magda dieron a conocer que el juez desistió de vincularlas a proceso. (Foto: Ariana Pérez)
Azucena Rangel
Ciudad de México /

Después de casi dos años un juez desistió del vincular a proceso a Karla, Magda y Areli quiénes fueron detenidas el 15 de abril de 2022 durante un operativo que realizó la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México para recuperar la sede de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, que permanecía tomada desde septiembre del 2020 por distintos grupos.

A través de su página “Libres Ya”, Karla y Magda dieron a conocer que el juez desistió de vincularlas a proceso luego de que la Fiscalía General de la República y la CNDH pidiera ejercer acción penal en su contra argumentando que daño habían hecho al patrimonio.

“Está vez la verdad estuvo de nuestro lado, el mismo juez reconoció la criminalización en contra de Karla y Magda y les dio un poco de lo que hace casi dos años les arrebataron, la libertad… Hoy su defensa, el Grupo de Acción por los Derechos Humanos y la Justicia Social logró demostrar que la CNDH solo buscaba castigar a quienes protestan, luchan y defienden los derechos”, precisó.

Asimismo agradecieron la solidaridad de todos quiénes las apoyaron para en un primer momento lograr que llevarán su proceso en libertad, hasta la resolución en la cual se decidió no vincularlas a proceso.

“Seguiremos luchando hasta ser plenamente libres. Hasta tener justicia. Hasta ver a nuestras compañeras de Eloxochitlán, a Kenia, a Miguel, a Yorch, a David y a muchas otras libres”, precisaron.

La Comisión Nacional de Derechos Humanos, ubicada en la calle de República de Cuba, fue tomada el 4 de septiembre de 2020 por colectivas y activistas feministas, quienes exigieron justicia y respeto para las víctimas de la violencia de género. 

Entre los rostros visibles del inicio de esta toma estuvo el de Yesenia Zamudio, madre de Marichuy Jaimes, quien fue víctima de feminicidio en 2016; y también el de Erika Martínez, quien, junto con otras feministas y madres de víctimas, pretendió subastar el cuadro de Francisco I. Madero que fue “intervenido” por su propia hija, víctima de abuso, al pintarle flores, los labios rojos y el cabello morado.


EHR

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