La fragmentación del cártel de Sinaloa desde el culiacanazo de 2019 posicionó a Iván Archivaldo y Alfredo Guzmán, hijos de El Chapo, como líderes y desató una ola de violencia en el noreste del país, concentrada principalmente en Baja California.
De acuerdo con una investigación del Semanario Zeta, Los Chapitos se disputan la entidad con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) por el control de rutas y puntos de venta de drogas.
En su publicación del primero de febrero pasado, el medio bajacaliforniano publicó que la entidad cerró el año 2020 con 2 mil 938 muertes violentas, que se atribuyen a la pugna de Los Chapitos por apoderarse de las rutas de venta y trasiego de droga en la entidad.
Según reportes de autoridades integradas a las Mesas de Coordinación, a los que tuvo acceso el semanario, los hermanos Iván Archivaldo y Alfredo Guzmán Salazar, así como Ovidio Guzmán López, trajeron su pugna territorial a Baja California, del lado de Mexicali por Sonora, encabezado directamente por su líder de sicarios, Néstor Ernesto Pérez Salas o Néstor Isidro García, El Nini, y sus células criminales; y Crispín Salazar Zamorano, cabecilla del grupo de Los Salazar, previamente radicados en Sonora.
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En los municipios de la zona costa bajacaliforniana, Iván Guzmán y Néstor Pérez buscaron y encontraron aliados:
En Tijuana, Pablo Edwin Huerta Nuño, El Flaquito, quien se formó en el crimen en las filas del Cártel Arellano Félix (CAF). Por Ensenada, David López Jiménez, El Lobo, y Édgar Pérez Villa, El Nier. En Tecate, las versiones se dividen. Por un lado, apuntan a Danny Ortiz, El Moreno, pero otros señalan a El Lobo.
Los hermanos Guzmán han tenido presencia en Baja California, donde por años las autoridades locales han reunido registros. En mayo de 2012, Iván y Ovidio fueron incluidos en la lista de alertas del Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
En 2019, Los Salazar ingresaron al Valle de Mexicali a matar a narcos que huían de Sonora. Un año después ya estaban instalados en parte de la zona suburbana de la ciudad capital, colindante con San Luis Río Colorado, Sonora, donde distribuyen droga y asesinan a sus contras.
Hay otros narcomenudistas al servicio de gente ligada a El Mayo Zambada.