En los municipios de Puebla como del resto del país, no se cumple con el estándar de 1.8 policías por cada 100 mil habitantes. En promedio, 26 por ciento de las demarcaciones no tiene ni un policía, mientras que 56 por ciento de ellos tiene menos de 50 elementos.
De acuerdo con los resultados del Atlas de la Seguridad y la Defensa de México en el que participaron investigadores del Centro de Estudios sobre Impunidad y Justicia de la Universidad de las Américas Puebla (Udlap), el Instituto Belisario Domínguez de Estudios Legislativos del Senado de la República y el Colectivo de Análisis para la Seguridad con Democracia (Casede), dentro de las 32 entidades federativas solo la Ciudad de México cumple el estándar mínimo de elementos de seguridad.
Juan Antonio Le Clercq, investigador de la Udlap, explicó que, en forma reiterada, México se caracteriza por muy altos niveles de impunidad y se coloca en la posición 60 de 69 países estudiados con una metodología desarrollada por la institución poblana.
“Estos resultados, de acuerdo a nuestros datos, son resultado de problemas de desempeño, tanto estructurales y funcionales, en las dimensiones de justicia y seguridad, pero también de la existencia de casos muy graves de violaciones a los derechos humanos”.
Resaltó la importancia de la importancia de discutir la justicia, la impunidad ambiental, el lavado de dinero y la violencia política, problemas que se viven en el país.
“Nuestros reportes especializados sobre México, Colombia, y muy recientemente sobre impunidad ambiental en nuestro país, representan la forma en la que nosotros tratamos de abordar la complejidad de la justicia, la seguridad y la serie de fenómenos que siempre van de la mano agudizando sus consecuencias. En ese sentido, las contribuciones con las que colaboramos en el Atlas 2020 se han enfocado especialmente a poner sobre la mesa la importancia de discutir la justicia, la impunidad ambiental, el lavado de dinero y la violencia política en los procesos electorales”.
Ante los problemas, el investigador destacó que la sociedad no puede aceptar quedarse atrapada en estrategias públicas ineficientes, pero, sobre todo, en la normalización social de la violencia y la victimización.
“Esperamos realizar una contribución al diseño de políticas de justicia y seguridad que nos permitan reducir significativamente los niveles altísimos de violencia que enfrenta y sufre los mexicanos, cotidianamente”.
Raúl Guillermo Benítez Manaut, investigador del Centro de Investigaciones sobre América del Norte de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), resaltó la importancia de analizar la nueva Agenda de Seguridad Nacional, la defensa y la justicia de los derechos humanos, así como el papel de la Guardia Nacional, el lavado de dinero y la corrupción.
“La pandemia mostró que, a pesar del cierre de la circulación de las personas en todo el país, los delincuentes no hicieron home office, las estadísticas son similares, lo que nos demuestra algo muy preocupante”, expresó.
AFM