Autoridades policiacas confirmaron que los restos humanos encontrados enterrados en un domicilio de San Nicolás corresponden a un solo cuerpo, y pertenecerían a un comerciante originario de la Ciudad de México, quien fue privado de la libertad en Guadalajara, Jalisco a principios del presente mes.
Los elementos de la Fiscalía Especializada Antisecuestros de Nuevo León realizaron las indagatorias en colaboración con la fiscalía jalisciense, y detuvieron en el sitio a un sospechoso.
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El plagio del comerciante, de 40 años y cuyos datos se mantienen en reserva, fue reportado el 9 de julio en Jalisco y, por medio de las pesquisas, ese mismo día se le ubicó en Nuevo León.
Por el momento, y tras una inspección ministerial que se prolongó hasta casi el amanecer del jueves, el inmueble donde se dio el hallazgo permanece acordonando.
Los restos son analizados en el Servicio Médico Forense (Semefo), y se esperan los resultados de las pruebas de ADN para confirmar la identidad de la persona asesinada.
El sitio del hallazgo es una casa habitación ubicada en la calle Tomás Urbina, entre Ernesto Ríos y Antiguo Camino a Santo Domingo, en la colonia Francisco Villa, de San Nicolás.
Habitantes de aquel sector, colindante con el canal del Topo Chico, comentaron que el mencionado domicilio estuvo deshabitado buen tiempo, después de que algunas personas lo rentaron en diferentes temporadas.