Por considerar que cuentan con las pruebas científicas suficientes para demostrar que las muertes de Angélica Ortiz Sena y Jesús Arturo Rodríguez Bastidas, en julio de 2015, no fueron un feminicidio y un suicidio, la familia de éste último pedirá a la Fiscalía General de Justicia del Estado de Nuevo León investigue de nueva cuenta este caso.
Previo a su cita con la autoridad, los familiares de Rodríguez Bastidas, acompañados de Gerardo Moreno, médico forense; Juan Carlos Tirado, criminólogo; José Esteban Llamas y Víctor Murillo, presentaron en rueda de prensa celebrada en las instalaciones de Ciudadanos en Apoyo a los Derechos Humanos, AC (CADHAC), evidencias que echarían abajo la teoría de que esas dos muertes se debieron a un feminicidio-suicidio.
De acuerdo con CADHAC, existe el antecedente de la recomendación 30/2017 de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Nuevo León donde se destaca que en este caso “se presentaron omisiones en la investigación al no agotar todas las hipótesis del caso, falta de información en el expediente, haber irregularidades en la escena del crimen y no garantizar una diligente investigación para la familia”.
Debido a esto, y a las pruebas con que cuenta la familia, compartirá con la autoridad los resultados de sus investigaciones propias para buscar que se haga justicia.
“La finalidad es que se investigue de forma diligente, transparente y objetiva la muerte de Angélica Ortiz Sena y Jesús Arturo Rodríguez Bastidas, atendiendo las omisiones e irregularidades antes cometidas”, mencionó la familia.
Por su parte, CADHAC recalcó el hecho de que en este acompañamiento que han hecho a la familia desde el 2015, lo que se busca es que se conozca la verdad sobre estos decesos.
“Buscamos que se esclarezcan los hechos para determinar qué fue lo que sucedió con la pareja, pues en caso de que la teoría del feminicidio-suicidio se compruebe incorrecta se deberá investigar y sancionar a los responsables”, señaló Consuelo Morales Elizondo, directora de la organización.