La Secretaría de Marina Armada de México (Semar) desplegó a más de 3 mil efectivos en casi un centenar de comandancias locales de al menos 15 estados, con la finalidad de otorgar capacidad operativa a corporaciones locales.
Información entregada por la Semar, vía transferencia para el periodo de 2018 a 2025, detalla que en total ha comisionado a 3 mil 391 militares navales a policías estatales, municipales, policías intermunicipales y áreas de tránsito y seguridad vial en las entidades.
¿En qué estados fueron los aseguramientos?
Los casos más notorios están en Veracruz, donde la Policía Intermunicipal Veracruz–Boca del Río integra a 461 elementos navales comisionados, y la Policía Intermunicipal Zona Sur Coatzacoalcos acumula otros 449.
A ellos se suman corporaciones como la Secretaría de Seguridad Pública del estado de Veracruz, la Fuerza Civil y fiscalías locales, además de la presencia de Policía Naval; lo que confirma que buena parte del despliegue de la Marina se concentra en esa entidad, establece la dependencia a través de trasparencia a través del Estado Mayor General y la Dirección General de Control de Personal.
En segundo plano aparecen los apoyos a policías municipales y estatales de destinos turísticos y zonas urbanas clave:
- Cozumel registra 92 elementos navales integrados a su policía municipal
- Tulum, 66
- Cancún, 51
- Puerto Morelos, 47
- Los Cabos, 72
Mientras que la policía municipal de Ecatepec, Estado de México, suma 53 elementos comisionados. A nivel estatal destacan las secretarías de Seguridad Pública de:
- Colima (67 elementos)
- Quintana Roo (92)
- Oaxaca (41)
- Guerrero (30)
- Tlaxcala (56)
- Baja California Sur (11)
Además de direcciones de seguridad pública en municipios como Valle de Bravo, Villa de Álvarez, Córdoba, Orizaba, Tecamachalco y Tecomán, entre otros.
El listado también incluye apoyos a áreas de tránsito y vialidad municipal –como Tampico, Othón P. Blanco o Guaymas– y a direcciones de seguridad pública local en ciudades medias donde la Armada ha terminado cubriendo huecos de policías débiles o rebasadas.
En paralelo, direcciones municipales como Valle de Bravo, Villa de Álvarez, Córdoba, Orizaba, Tecamachalco, Chignahuapan, Tecomán, Mulegé, Empalme, Guaymas o San Felipe también mantienen personal castrense naval incorporado a sus operaciones diarias.
Elementos desplegados por la Marina en los últimos años
El registro de comisiones muestra que, entre 2018 y 2025, Sedena movilizó 19 mil 372 efectivos hacia distintas instituciones civiles. De ellos, 15 mil 981 se incorporaron formalmente a la Guardia Nacional.
Entre otras cosas, las misiones de los marinos es cubrir vacíos, realizar patrullajes, sustituir funciones preventivas e incluso respaldar áreas administrativas.
Desde 2018 se observa un cambio gradual en la manera en que la Marina alimenta a las policías locales.
En los primeros años del sexenio pasado, el número de militares navales comisionados a estados y municipios era relativamente acotado y se concentraba en unos cuantos enclaves: policías intermunicipales de Veracruz, algunas secretarías estatales y corporaciones municipales específicas.
Era una fase de “prueba”, en la que la Armada empezaba a cubrir huecos mientras se construía la estructura de la Guardia Nacional, y en el que el apoyo a policías locales operaba casi como un refuerzo extraordinario más que como un esquema permanente.
A partir de 2020 y sobre todo en 2021, el movimiento de personal se aceleró.
Los datos proporcionados en respuesta a una solicitud de información muestran cómo crecieron las comisiones hacia policías estatales y municipales en paralelo a la expansión de la Guardia Nacional.
Es el periodo en que se disparan los envíos a las policías intermunicipales de Veracruz y Coatzacoalcos, a las corporaciones de Colima, Quintana Roo, Baja California Sur y a distintos municipios turísticos y urbanos.
Semar, parte de la estructura de seguridad
La Marina dejó de ser sólo un “apoyo” temporal y pasó a ser parte estructural del modelo de seguridad local.
Los marinos —dijeron fuentes— integran además células mixtas y se suman a áreas de investigación e inteligencia naval, mientras los estados aprovechan el refuerzo sin lograr consolidar sus propias plantillas civiles.
A partir de 2022 se apreció un reacomodo, pero no un retiro, pues el volumen total de efectivos comisionados a policías locales bajó respecto al pico de 2021, sobre todo porque muchos elementos se canalizan de manera prioritaria a la Guardia Nacional y a operaciones federales específicas.
Sin embargo, el padrón de corporaciones que reciben militares se mantiene prácticamente intacto y en algunos casos incluso se amplía hacia nuevos municipios.
RM