Luego de que el presidente Andrés Manuel López Obrador informara este jueves en su conferencia matutina que las personas presas que hayan sido torturadas podrían quedar libres, si comprueban los hechos, han surgido dudas sobre el Protocolo de Estambul, por eso te contamos en qué consiste este manual.
El Presidente pidió comprobar mediante el Protocolo de Estambul los casos de tortura, ya que anunció que presentará un decreto para liberar a las personas que están en cárceles federales y que tengan más de 75 años de edad, así como a aquellos que lleven más de 10 años privados de su libertad y sin sentencia.
“No queremos la tortura en México. Nadie merece ser torturado, nadie, entonces estas acciones van a formar parte de un decreto que voy a firmar y que va a elaborar la Secretaría de Gobernación. Lo vamos a elaborar la semana próxima para presentar y publicar”, dijo en La Mañanera.
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¿Qué es el Protocolo de Estambul?
El Protocolo de Estambul es un manual para la investigación y documentación eficaz de la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanas o degradantes. En estos casos, la tortura se ejerce por parte de los servidores públicos, por eso se considera una violencia de Estado.
Por su parte, el Comité de Defensa Integral de Derechos Humanos Gobixha lo define como una guía que contiene las líneas básicas con estándares internacionales en derechos humanos para la valoración médica y psicológica de una persona que se presuma o haya sido víctima de tortura o algún mal trato. Su aplicación requiere reconocer el contexto en el que se dan los hechos, es decir, realizar una investigación psicosocial, puesto que cada caso es diferente.
El protocolo fue aprobado por la Organización de la Naciones Unidas en 1999; sin embargo, en el mundo existe una prohibición de la tortura y todas las formas de crueldad y humillación desde 1948, año en que se aprobó la Declaración Universal de los Derechos Humanos, según señala Amnistía Internacional.
¿Cómo se aplica el Protocolo de Estambul?
A pesar de que el Protocolo de Estambul marca algunas directrices para su aplicación, éstas no son rígidas, sino más bien están a consideración de las características del caso a evaluar. De dichas instrucciones destacan las siguientes:
- Historia / exploración psicológica: En este punto se integran los antecedentes psicológicos previos y posteriores a la tortura, examen del estado mental, el funcionamiento social y todas las secuelas que deja el hecho traumático.
- Exploración física exhaustiva: Para poder verificar el estado de salud de la persona se deben realizar diversos estudios clínicos especializados que recorran la cabeza, cara, oídos, nariz, garganta, ojos, cavidad oral y dientes, tórax y abdomen, sistema genitourinario, sistema musculoesquelético, sistema nervioso central y periférico, etc.
- Alegaciones de tortura y malos tratos: Resumen de los hechos, mencionando los datos de la detención, lugares y una cronología.
- Historia psicosocial previa a la detención
- Calificación del clínico o los clínicos: Se tendrá que aprobar formación académica y la experiencia en la documentación de casos de tortura.
- Información general del caso: fecha del examen, si existe algún tipo de restricción para su aplicación, si hay o no consentimiento de la persona para su aplicación.
Caso Israel Vallarta
La propuesta de decreto del Presidente llega cuando el caso de Israel Vallarta, presunto integrante de la banda Los Zodiaco, y señalado de secuestro, está de nuevo en la agenda pública y mediática, tras casi 16 años en prisión y sin una sentencia emitida.
La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, dijo en la conferencia matutina que su familia “no ha aceptado las estrategias planteadas por la Secretaría de Gobernación consistentes en promover el incidente de libertad por desvanecimiento de datos”.
“Esta estrategia lo beneficiaría para una de las dos causas penales que tiene acumuladas, de tal suerte, que si se aplica el precedente Cassez, es previsible que sea absuelto en dicho asunto. No es así en la otra causa que continúa pendiente”, señaló.
Sin embargo, María Guadalupe Vicencio Sánchez, esposa de Israel Vallarta, y el abogado Arturo Robles Feria, plantearon que la única salida a las acusaciones por secuestro y delincuencia organizada que mantienen en prisión a Israel es que el Poder Judicial federal dicte sentencia absolutoria y no por otras vías que también podrían dejarlo en libertad.
Israel Vallarta por su parte, en llamada telefónica realizada desde el penal del Altiplano, dijo que espera justicia por todos los años que ha sido víctima de tortura, pide ser escuchado, ya que se ha hecho caso omiso a sus demandas y peticiones por todas las violaciones que se han cometido en su caso y a su persona.
DMZ