Después de que se diera a conocer que la periodista Teresa Montaño fue víctima de un secuestro exprés la semana pasada en el municipio de Zinacantepec, el fiscal general de justicia en el Estado de México, Alejandro Gómez Sánchez, precisó que hasta el momento no hay indicios de que el hecho delictivo esté vinculado con su actividad profesional.
En breve entrevista el titular de la fiscalía estatal aseguró que las investigaciones recabadas hasta el momento apuntan a un móvil distinto al de su trabajo de comunicadora y corresponsal en la entidad mexiquense.
“Hasta ahorita con los elementos que tenemos y con lo que la propia Tere ha declarado, creemos que todavía no hay algún indicio que nos haga pensar que este delito se haya cometido con motivo de su labor periodística".
Gómez Sánchez destacó que continúa el desplegado de inteligencia para esclarecer el caso a la brevedad. “Me apena muchísimo que haya pasado una situación de esta naturaleza, la estamos atendiendo y estaremos a sus órdenes... Seguimos recabando datos y espero que en breve tengamos buenas noticias”.
¿Qué pasó?
El viernes 13 de agosto Teresa Montaño fue privada de la libertad durante tres horas en Zinacantepec, municipio ubicado en el Valle de Toluca. Durante dicho lapso sus cuentas bancarias fueron saqueadas y su equipo de trabajo robado.
En un desplegado, la también fundadora y directora del portal independiente “The Observer”, comentó que su seguridad y la de sus familiares está en manos de las autoridades ya que los presuntos delincuentes la amenazaron para que no denunciara, sin embargo, lo hizo.
El secretario General de gobierno de la entidad, Ernesto Nemer Álvarez, habría precisado que el Estado da todo el apoyo correspondiente por el abuso cometido en contra de la comunicadora. Se difundió que recibe atención jurídica y psicológica.
KVS