Sedena ha formado a más de 100 mil soldados en 25 años

En este espacio, las unidades blindadas, regimientos blindados y brigadas, acuden a su adiestramiento modular

Desfile del Ejército en Nuevo León | Leonel Rocha
Ciudad de México /

Un estruendo retumba cuando el cañón sin retroceso Watervliet Arsenal, de 106 milímetros, es accionado por la Primera Batería del 6to grupo de cañones del Ejército mexicano. La bala golpea un diminuto rectángulo colocado sobre el cerro Perla, que asemeja un vehículo blindado, dejando a lo lejos una cortina de humo. Los artilleros ensordecidos dieron en el blanco.

Por las características de la artillería, estas prácticas requieren de las 60 mil 538 hectáreas que tiene el Centro Nacional de Adiestramiento (CNA), según explica el Teniente Coronel Antonio Macías, comandante de este grupo, que se encuentran de visita en este campo.

El CNA de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), ubicado en el campo militar 42-A, de Santa Gertrudis, Chihuahua, es considerado el más grande del país. Sumando el contiguo criadero Militar de Ganado, alcanza las 150 mil hectáreas.

Aquí, los mandos militares y sus auxiliares, grupos de comando, unidades de las armas y servicios del Ejército mexicano y Fuerza Aérea Mexicanos realizan la tercera, cuarta y quinta fase de su adiestramiento para la conducción de operaciones de seguridad interior, seguridad pública y Defensa Nacional.

“La misión principal es capacitar a los mandos y sus auxiliares, sus estados mayores y grupos de comandos, en lo que refiere a la concepción, planeación de quito nivel en los ámbitos de la defensa nacional, en la seguridad interior y seguridad pública, y prácticamente esa es la esencia de este centro”, explica el General Issac Bravo López, Comandante del CNA.

En medio del desierto, sin nada a kilómetros a la redonda, se aprecia una torre de vigilancia. Es el polígono de tiro Francisco Villa. A lo lejos y hacia arriba, se ve cómo los aviones T-6C Texan II artillados surcan el “borregoso” cielo de Chihuahua en cuestión de segundos, para lanzar sus disparos contra el suelo.

Son vuelos de reconocimiento, de ataque, de bombardeo o de transporte. Vuelan a 10, 20 y 30 grados, y pasan a menos de 30 metros del suelo, maniobras que no se ven todos los días, pero que forman parte del adiestramiento de manera modular en su tercera fase.

“Los pilotos constantemente deben de realizar estas aproximaciones, ya que ayudan a incrementar sus habilidades tanto técnicas como para el pilotaje. Es la práctica, porque es lo único que los va a llevar a realizarlo de una forma adecuada y correcta. Entonces, ellos tienen que estar constantemente en el adiestramiento para que puedan efectuar estos patrones de la forma idónea o como está establecida”, dice en entrevista el capitán segundo piloto aviador Luis Felipe Hernández.

En tierra, el 5to regimiento mecanizado despliega los blindados de oruga AMX-13 para realizar operaciones ofensivas; una penetración, y la captura de un objetivo.

“Aquí se materializa lo que es el planeo, la organización y sobre todo la materialización de que el personal de las tripulaciones de los vehículos, los comandantes de todos los niveles, desde escuadra, pelotón, sección y escuadrón, y por supuesto, el comandante de regimiento”, destaca el Teniente Coronel Pablo Vázquez, comandante del regimiento.

Refiere que el CNA es el lugar idóneo para el adiestramiento, pues emplean armamento con un alcance de hasta 6 kilómetros.

En este espacio, las unidades blindadas, regimientos blindados y brigadas, acuden a su adiestramiento modular, para luego realizar actividades conjuntas. Una vez que llegan a la cuarta fase, cada fuerza realiza los adiestramientos de Armas Combinadas, en donde la artillería, la infantería, los ingenieros, la caballería, o los blindados realizan un ejercicio de defensa nacional.

En el campo militar de Santa Gertrudis, el Mirador de Agua Nueva es conocido como “el Pináculo del Adiestramiento”. Desde este punto se aprecia un desierto con 11 kilómetros de profundidad por 5 kilómetros de frente, rodeados por grandes masas de tierra, como si fuera un gran patio de juegos, donde pueden verse interactuar unidades del Ejército mexicano, la Fuerza Aérea y la Guardia Nacional.

Con binoculares al cuello, los mandos materializan la concepción, planeación y conducción de operaciones de quinta fase de adiestramiento de armas combinadas de defensa nacional.

“Es aquí donde ya se conjunta un mando encargado del agrupamiento de adiestramiento, conjunta las actividades del Ejército mexicano, la Fuerza Aérea y la Guardia Nacional en una sola actividad, en un solo ejercicio”, detalla el Coronel Ricardo Reynoso Lagunas, subjefe operativo del CNA.
“Todos los sistemas de armas pueden ser empleados en polígonos de tiro como este. Esta peculiaridad que tiene este campo de tiro no la podemos encontrar en ninguna otra parte del país. Entonces, esta es la gran característica que hace idóneo y único a este Centro Nacional de Adiestramiento”.

En septiembre, el CNA llegó a su vigésimo quinto aniversario, con más de 100 mil elementos que han pasado por aquí, entre mandos, auxiliares, tropas y servicios, siempre con la misión de defender la integridad, independencia y soberanía de la nación. El general Issac Bravo recuerda su paso por este centro cuando fue Capitán en el año 2000 para integrarse a una unidad blindada. “Para mí –dice– es un verdadero honor, orgullo y un reto estar aquí como comandante desde el CNA, ya que esta es la esencia para que el personal se capacite, se adiestre y cumpla eficazmente con sus misiones”.


  • Amílcar Salazar Méndez

LAS MÁS VISTAS

¿Ya tienes cuenta? Inicia sesión aquí.

Crea tu cuenta ¡GRATIS! para seguir leyendo

No te cuesta nada, únete al periodismo con carácter.

Hola, todavía no has validado tu correo electrónico

Para continuar leyendo da click en continuar.