En junio de 2019, una heroína de cuatro patas se retiró de servicio. Frida, la perrita rescatista de la Marina dejó el servicio tras 10 años de ayudar en la búsqueda y rescate de personas en numerosas emergencias. La labrador se convirtió en un símbolo de la Semar tras su participación en diversos rescates en edificios colapsados por el sismo del 19 de septiembre de 2017.
En sus años de servicio participó en sucesos entre los que destacan: el terremoto de Haití en el 2010, la explosión de la Torre de Pemex en el 2013, el terremoto de Guaranda en Ecuador en el año 2016 y los sismos de Oaxaca y la Ciudad de México del 2017, localizando a un total de 12 personas con vida.
Luego de su retiro, la herencia ha recaído sobre otro can: Ecko, el cual cuenta con menos experiencia que Frida, pero que es parte de los binomios caninos más confiables que hay en el país. Lo ha demostrado en su participación de búsqueda y rescate en el terremoto de 2017 y el desgaje del cerro del Chiquihuite en 2021. Con 5 años de servicio, este pastor belga ha localizado a 4 personas con vida.
Además de Ecko, se encuentra la perrita Max, una boodhoud que se hizo famosa por ayudar a la localización del narcotraficante Caro Quintero, y a punto de graduarse está Nico, un pastor, que a sus 9 meses ha demostrado que tiene la capacidad de localizar a personas en caso de un colapso.
Junto con estos binomios, la Marina prepara a una nueva generación de canes para búsqueda y rescate, para lo que apoya la propia Frida desde su retiro. MILENIO visitó a estos héroes de cuatro patas, que con su equipo, chaleco y googles, realizaron ejercicios para localizar a personas entre los escombros de manera exitosa. Manuel Hernández, manejador de Ecko, destaca la importancia de las unidades caninas.
“Las capacidades y cualidades olfativas que tienen nuestros elementos caninos y todos los perros que están entrenados para este tipo de funciones son muy altas, sabemos que los perros tienen mayor número de terminales nerviosas dentro de la cavidad nasal y esto es lo que nos va ayudar a localizar el aroma de una persona hasta por debajo de 15 metros de escombro, claro los equipos de rescate cuentan con herramientas tecnológicas muy avanzadas, pero es más avanzado el instinto que puede tener un perro y las cualidades afectivas como auditivas que nos van a ayudar a la localización de estas personas”.
Frida, Ecko y Max han probado que salvan vidas en diversas emergencias desde la creación del programa y aunque la Marina, con 450 canes, ha especializado a los binomios caninos en distintas labores, en el ámbito civil también hay esfuerzos para que estos héroes de 4 patas apoyen a sus dueños, pues en la alcaldía de Tlalpan se instauró un curso para que mascotas puedan localizar a sus dueños en caso de un derrumbe o colapso.
Con dicha preparación, que se imparte en instalaciones del Centro de Formación de dicha demarcación, 27 perritos de distintas razas han aprendido a seguir el rastro de sus dueños o integrantes de la familia y dar señales para su localización.
“El perro tiene que intentar mover tablas o láminas para, de alguna u otra forma, acceder al momento que no puede llegar a su dueño, entonces el perro estará diciendo con su nariz posiblemente, chillando o ladrando donde se encuentra la persona”, explicó Carlos Castro, subdirector de promoción a la salid y protección animal de Tlalpan.
Ante la demanda para esta instrucción, la cual no es profesional, ha ido en aumento, por lo que la alcaldía analiza mantenerla para otros canes. Por lo pronto es otra manera de conmemorar el 19 de septiembre y estar preparados para nuevas emergencias.
“Es una fecha significativa ya que sí creemos que en cada familia puede haber un héroe, la gente siempre dice: se acerca 19 de septiembre me voy a quedar con croquetas dentro de mis bolsillos, no, los perros no funcionan así pero si podemos tener un héroe en casa”.
dr